Río Paraná muestra "importante" descenso tras dos semanas de inundaciones

Asunción, 8 jul.- El río Paraná muestra un "importante" descenso, mientras que el caudal del Paraguay "mantiene la tendencia a seguir creciendo", después de dos semanas provocando inundaciones, informó hoy la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) paraguaya.

El desborde de ríos y arroyos afluentes del Paraguay y el Paraná afecta a unas 8.000 familias en todo el país, que han tenido que trasladarse a campamentos temporales dispuestos por el Gobierno, o irse a casa de familiares, según declaró a radio Uno el jefe de Operaciones de la SEN, Aldo Saldívar.

Saldívar, que lidera las labores de asistencia a los afectados, dijo que el buen clima registrado la semana pasada posibilitó que los trabajos de ayuda a los damnificados se ejecuten de forma rápida.

"Lo que principalmente demanda esta gente es alimentos, abrigos, carpas, chapas, las familias son desplazadas de sus hogares a albergues transitorios y después vuelven nuevamente a sus casas. Ahora inicia un largo proceso de recuperación", destacó.

La Cámara de Senadores declaró el pasado jueves el estado de emergencia en la capital y los departamentos de Central, Ñeembucí y Misiones, fronterizos con Argentina, así como de Amambay y Alto Paraná, que hacen frontera con Brasil, para combatir las inundaciones que afectan a esos territorios.

"Más hacia arriba, en Bahía Negra la intensidad de la crecida es muy leve, de uno o dos hasta cuatro centímetros al día. Sin embargo, aguas abajo, desde Asunción más al Sur, la crecida se dio con gran intensidad", añadió.

El último fin de semana un total de 900 familias damnificadas por la crecida del río Paraguay, de diferentes zonas de la capital del país, fueron asistidas por la secretaría de Estado, según la agencia estatal IP.

Las ciudades más afectadas por las inundaciones se encuentran en los departamentos de Misiones y Ñeembucú, así como al departamento de Alto Paraná.