Un vecino de Oviedo de 57 años, que responde a las iniciales P.LL.G., ha sido detenido como supuesto delito de colaboración al suicidio de un hombre que localizaron muerto el 29 de septiembre de 2019 con un disparo en la cabeza en el municipio asturiano de Siero. También ha sido detenido el dueño del arma ilegal.
Según la Guardia Civil, el escenario de la muerte fue planificado para aparentar un homicidio, para lo que contó con la participación de un amigo. Los investigadores consideran que el fallecido, desesperado ante la situación por la que se hallaba pasando de soledad y precariedad económica, planificó su muerte con ayuda de ese amigo para que pudiera parecer un homicidio al retirar el arma empleada, y así tratar de poner el punto de mira de los investigadores en su exmujer, a la que culpaba de su situación en la que se encontraba.
La investigación se ha llevado a cabo bajo dirección del titular del Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción nº 3 de Pola de Siero, así como del Fiscal adscrito al mismo. La Guardia Civil explica que la investigación de lo que en principio parecía un homicidio fue laboriosa.
Las investigaciones llevadas a cabo en torno a la víctima permitieron conocer que se trataba de una persona más bien solitaria, con un círculo de amistades muy reducido, nulo trato con el vecindario, con una relación tensa con su expareja, propietaria de la vivienda donde residía, y con un expediente de desahucio inminente. Esto último le suponía un constante quebradero de cabeza, comentándolo en numerosas ocasiones con su escaso círculo de amistades.
Obsesionado con el suicidio
La investigación se centró en la vida del fallecido y de su entorno, obteniendo datos bastante esclarecedores, como su obsesión con el desahucio, y con el suicidio, realizando numerosas búsquedas en Internet sobre testamentos, antidepresivos que pudieran facilitar la conducta suicida, o tiempo de agonía y posibilidad de supervivencia en relación con disparos en la cabeza, o estadística de muertos o heridos por armas de caza y artículos relacionados con cómo provocar incendios.
El trozo de madera hallado en la inspección ocular, después de diversos estudios periciales, pudo ser relacionado con un arma que se encontraba depositada en la Intervención de Armas de la Comandancia de Oviedo. Esta, había sido incautada un mes después de la muerte del vecino de Xixún (Siero) a una persona en el transcurso de una disputa.
Así se puedo confirmar que se trataba del arma utilizada para efectuar el disparo que le había provocado la muerte. Este hallazgo llevó a los agentes de la Guardia Civil hasta un amigo cercano del fallecido, quien se la había pedido prestada a su dueño para supuestamente cometer un robo.
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