Francisco ha pedido de nuevo que haya convivencia pacífica entre las personas que profesan distintas religiones en Azerbaiyán donde la mayoría de la población es musulmana y los católicos son pocos centenares.
"Gracias a Dios tienen buenas relaciones con todos, en particular, mantienen vínculos fraternos con los cristianos ortodoxos", ha reseñado.
En este sentido, ha recordado la eucaristía con los católicos como uno de los momentos más especiales del viaje a Azerbaiyán. "Cristo empuja a buscar el encuentro con todos aquellos que creen en Dios, para construir juntos un mundo más justo y fraternal", ha señalado.
Por eso, ha especificado que en su discurso a las autoridades de este país pidió "que las cuestiones abiertas puedan encontrar buenas soluciones y todas las poblaciones del Cáucaso vivan en la paz y el respeto recíproco".
El Papa ha recordado también las etapas de su viaje a Georgia y ha destacado como "conmovedor" el encuentro con el Patriarca Ilia II y su visita a la Catedral Patriarcal donde se venera la "reliquia de la túnica de Cristo" que ha definido como "símbolo de unidad de la Iglesia". "Esta unidad está corroborada por la sangre de tantos mártires de las diversas confesiones cristianas", ha señalado.
Además, ha criticado el "proselitismo" y ha dicho que la fe debe ser una "atracción a Cristo" a través de la "caridad concreta" y el "servicio a Jesús".
Finalmente, ha señalado que la Iglesia católica está llamada a "estar presente y ser cercana, especialmente en el signo de la caridad y la promoción humana" y "hacerlo en comunión" con otras Iglesias y comunidades cristianas.
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