Rabat, 12 oct.- Un senegalés murió el pasado jueves en Tánger al caer de un cuarto piso cuando trataba de huir de la Policía marroquí que practicaba en ese momento una redada, según un comunicado oficial difundido anoche por la Wilaya (gobernación) de Tánger.
El comunicado precisa que la Policía acudió al inmueble tras recibir denuncias sobre "la ocupación ilegal de apartamentos ajenos" por personas de diversas nacionalidades, en el barrio de Bujalef, al sur de Tánger.
La investigación preliminar encargada por la Wilaya estableció que el joven senegalés "al tener conocimiento de la presencia de (agentes de) autoridad en el barrio, trató de abandonar el apartamento por una ventana, sin percatarse del peligro que corría".
La Wilaya confirma así la noticia que ya ayer fue denunciada por varios organizaciones de apoyo a los emigrantes subsaharianos en Marruecos, pero subraya que se trató de un accidente.
La Organización Democrática del Trabajo denunció, por su parte, que los agentes de Policía "sobrepasaron sus competencias al penetrar en un domicilio privado sin mandato judicial", y exigen la apertura de una investigación independiente sobre los hechos en la que participen organismos de la sociedad civil para depurar responsabilidades.
La muerte del senegalés se produce cuando el rey Mohamed VI anunció una nueva política hacia la emigración más respetuosa con los derechos de los emigrantes, principalmente subsaharianos que malviven en Marruecos generalmente en condiciones muy precarias de empleo, vivienda o acceso a los servicios básicos.
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