Lisboa, 16 jul.- Varias manifestaciones, a las que se sumaron cientos de portugueses convocados en las redes sociales, pidieron hoy la dimisión del ministro luso más polémico, Miguel Relvas, al que han salpicado varios escándalos en pocos meses.
El debate sobre Relvas, uno de los pesos pesados del gobernante Partido Social Demócrata (PSD, centroderecha), ha protagonizado tertulias de televisión, se ha instalado en la calle e, incluso, hoy una casa de apuestas "online" permitía a sus clientes jugarse dinero por su salida o no del gabinete antes de fin de mes.
Los manifestantes, que se concentraron en las ciudades de Lisboa, Oporto y Coimbra, pidieron la dimisión "inmediata" del ministro y exhortaron a la clase política a recuperar la "credibilidad".
La iniciativa fue liderada por el realizador de cine Miguel Goncalves, quien creó en la red social Facebook un evento al que se adhirieron cerca de 4.000 personas, aunque finalmente el número que acudió a las protestas fue inferior.
Titular de la cartera de Asuntos Parlamentarios, Relvas se ha visto relacionado con un exresponsable de los servicios secretos lusos al que investiga la Fiscalía por sus actividades para empresas privadas.
Además, el ministro fue acusado en junio pasado de presionar a medios de comunicación para evitar la publicación de noticias relacionadas precisamente con ese asunto, en el que él ha subrayado siempre su inocencia.
Pero ahora el motivo que ha movido a los manifestantes a pedir su dimisión, apenas un año después de llegar al poder, es una nueva polémica surgida en torno a su título universitario, en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales, que consiguió en un curso y no en tres gracias a unas cuestionadas convalidaciones.
La Fiscalía lusa investiga si existen indicios de delito en esa conducta e, incluso, algunos de sus compañeros de partido ya han solicitado públicamente la dimisión de Relvas, aunque el jefe de Gobierno, Pedro Passos Coelho, mantiene su confianza en él.
El ministro, cuya rápida licenciatura en 2007 ha sido puesta en evidencia por varios medios lusos, asegura que las convalidaciones fueron otorgadas por su currículum laboral.
Relvas comenzó su carrera política muy joven y ya era diputado con apenas 23 años en la década de los ochenta, cuando empezó a compaginar sus obligaciones, en el Parlamento y como secretario de Estado en diferentes períodos, con los estudios de Derecho, Políticas e Historia, que no llegó a terminar.
La legislación lusa permite conceder créditos en reconocimiento a la experiencia profesional de antiguos alumnos universitarios que vuelven a los estudios, aunque diferentes voces académicas han criticado los que se otorgaron a Relvas, uno de los líderes del PSD que apoyó el ascenso de Passos Coelho en el partido.
El escándalo de la licenciatura ha saltado a la prensa y la calle cuando aún colean las acusaciones contra el titular de Asuntos Parlamentarios lanzadas por el diario "Público", uno de los principales de Portugal.
El rotativo informó de que el ministro amenazó a la periodista María José Oliveira con divulgar algunos de sus datos personales en internet, si publicaba una noticia que le vinculaba con el exjefe de los servicios de inteligencia.
El episodio fue analizado por la Entidad Reguladora de la Comunicación Social lusa sin que finalmente se pronunciara contra Relvas.
En el otro caso, la Fiscalía lusa todavía investiga si el antiguo jefe de los servicios secretos Jorge Silva Carvalho facilitó información privilegiada a la empresa Ongoing, dueña de varios medios de comunicación y de la que hoy es empleado.
El escándalo salpicó a Relvas cuando se supo que Silva Carvalho intercambió mensajes telefónicos con él y le hizo llegar una propuesta para reformar los servicios de inteligencia lusos.
Las polémicas sobre Relvas han sido el incidente más aparatoso que ha sufrido el gabinete ministerial de Passos Coelho desde su victoria en las elecciones de junio de 2011.
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