Una transición política debe integrar elementos del antiguo régimen, dice Cebrián

Nueva York.- Juan Luis Cebrián, consejero delegado del grupo Prisa, defendió hoy que las transiciones políticas que se buscan en Oriente Medio deberían integrar a parte de la estructura de los antiguos regímenes tal y como ocurrió en España, un país, dijo, que, pese a la crisis, "ahora es una tierra de oportunidades".

"Hay que entender que las revoluciones no son transiciones, pero hay algunos modelos de la transición española que se podrían utilizar en lo que está ocurriendo" en Oriente Medio, apuntó Cebrián en declaraciones a la prensa en Nueva York.

El periodista y académico español presentó hoy en esta ciudad la versión en inglés de su libro "El pianista en el burdel", prologado por el británico Harold Evans, ex director de The Times, en un acto en el que participaron también Peter Mayer, fundador de Overlook Press -editora de la obra- y ex consejero delegado de Penguin Books.

Según Cebrián, cuyo libro reflexiona sobre el periodismo y su función protectora de la democracia, la transición española no consistió en "pasar por la guillotina todo el pasado y poner una nueva estructura", sino que se hizo en un "acuerdo de reconciliación entre el pasado y lo nuevo, y después de una guerra civil".

El caso de España, "no fue un proceso revolucionario, pero tampoco evolutivo; fue una ruptura real, teniendo en cuenta la vieja estructura, que a veces colaboró de manera mucho más eficaz y rápida porque eran conversos a la democracia", señaló el consejero delegado de Prisa, quien citó a Polonia y Chile como casos similares al español.

"En Egipto y Túnez, esta experiencia puede ser útil: No se puede construir una transición sin elementos del antiguo régimen que hayan colaborado con la dictadura", como ocurrió en España, donde, recordó, "la mitad de la población había colaborado con el franquismo y la mitad de la estructura de la transición estaba compuesta por ellos".

En todo caso, reconoció que son países "mucho más jóvenes, con más problemas económicos y de analfabetismo, con menos tradición de unidad histórica y con más influencia del poder religioso", al tiempo que están "en una zona mucho más caliente".

"Es una situación mucho más compleja, pero hay que verla con optimismo", apuntó el consejero delegado de Prisa, quien reconoció que el caso de Libia es "mucho más complicado", porque es un país "muy desestructurado", Muamar el Gadafi es "un tirano" y el estado es "su finca personal", al tiempo que la población está armada.

Sobre el papel de las redes sociales en esos levantamientos populares, señaló que "sirven muy bien para convocar manifestaciones y comunicar noticias concretas, pero para el análisis y la compresión de la situación aún no son útiles".

"Aunque las nuevas tecnologías están amenazando al método tradicional de hacer diarios y publicar libros, en el futuro diarios y libros seguirán siendo importantes", defendió Cebrían, quien se reconoció preocupado por la posibilidad de que se deje de "invertir en recursos humanos, en corresponsales, que es lo que necesitan los periodistas para ser independientes y estar cualificados".

Sobre la situación de España, aseguró que la crisis que atraviesa no es económica sino "política" y que se debe a una "falta de confianza en la clase política, liderazgo en la Unión Europea y fuerza de la gente para luchar por lo que quiere".

"España es una tierra de oportunidades" en términos económicos pero también, explicó, porque "tenemos recursos humanos y capacitación, gente bien formada y con mucho respeto por la democracia, y estamos muy internacionalizados".

"Me siento muy optimista respecto a su futuro", señaló Cebrián.