Encontramos numerosas enfermedades reumáticas que pueden manifestarse de forma muy diferente. Muchas de ellas lo hacen presentando artritis, es decir, inflamación de las articulaciones que causa dolor, hinchazón, limitación para el movimiento y aumento de temperatura.
La artritis, como manifestación de la gran variedad de enfermedades que pueden causarla, en algún momento de la vida, puede sufrirla hasta el 10% de la población española: “La artritis es la inflamación de las articulaciones y es una de las manifestaciones más frecuentes de las enfermedades reumáticas. De entre todas, la más representativa y emblemática es la artritis reumatoide, que afecta aproximadamente al 1% de la población española”, explica el jefe de servicio de Reumatología del Hospital Quirónsalud Córdoba, el Dr. Manuel Romero.
Si la artritis se detecta en fase temprana, las probabilidades de evitar el daño de las articulaciones y de controlar la inflamación en las mismas aumentan exponencialmente. En algunos supuestos, identificar pronto esta enfermedad puede ser clave para “impedir su progresión” y evitar “daños articulares en el futuro” e incluso hacer que la artritis remita, destaca el Dr. Romero.
“Un diagnóstico precoz es importante para impedir su progresión”
La artritis reumatoide es la más común de todas, pese a afectar aproximadamente a tan solo un 1% de la población española (300.000 personas). Este tipo de afección se caracteriza por una inflamación “con un alto poder destructivo de las articulaciones de mediano y pequeño tamaño, como muñeca, manos, codos, hombros y pies”, indica el doctor, aunque puede dañar cualquier articulación u órgano del cuerpo.
Impacto sensible en el individuo
El origen de la artritis reumatoide es desconocido, aunque sí se sabe que existe cierta predisposición genética a padecerla. Se considera, además, que los factores ambientales pueden influir en la aparición de la misma, pero podrían evitarse aplicando en nuestras vidas algunas medidas preventivas “como comer de manera sana, seguir una dieta mediterránea, mantener una buena higiene bucal y evitar el tabaquismo”, señala el especialista.
Por otra parte, la espondiloartritis engloba a un grupo de las artritis que afecta al 0,5% de la población española. Consideramos “la espondilitis anquilosante, la artritis psoriásica, la artritis reactiva, las relacionadas con las enfermedades inflamatorias intestinales y las formas infantiles” como afecciones que entran dentro de este conjunto. La espondilitis anquilosante es, entre ellas, la más representativa, siendo característico su comienzo en varones jóvenes que comienzan a sufrir dolor lumbar de características inflamatorias, es decir, con el reposo, durante la noche, y además rigidez lumbar al levantarse.
Influencia en la calidad de vida
Tanto la espondiloartritis como la artritis reumatoide tienen una repercusión muy significativa en nuestro día a día. No solo inciden en la salud general del paciente, también en las relaciones y capacidades sociolaborales. Y en concreto, los que sufren artritis reumatoide “presentan un aumento del riesgo de padecer otras enfermedades asociadas como infecciones y cardiovasculares, entre otras”, añade el doctor Romero.
“Los que sufren artritis reumatoide presentan un aumento del riesgo de padecer otras enfermedades asociadas”
En el caso de los niños, es esencial tener en cuenta que pueden sufrir la variante idiopática juvenil, que puede manifestarse de maneras muy diferentes y afectar a niños de edades dispares. “Tanto ante este tipo de artritis como cualquier otro, es fundamental acudir a un centro médico que cuente con una consulta específica de artritis con el fin de recibir una asistencia personalizada y pormenorizada”, recomienda el especialista del Hospital Quirónsalud Córdoba.
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