Según las primeras manifestaciones de los tres amigos que le acompañaban en estos días de vacaciones en la isla, el joven cayó en una poza y fue succionado por un bufadero. En ese momento le perdieron de vista y rápidamente dieron la voz de alarma, activándose los servicios de emergencia.
Una embarcación de Salvamento Marítimo y un helicóptero estuvieron hasta última hora de ayer intentando localizar sin éxito al desaparecido. Esta mañana se reanudaron las labores de búsqueda, en esta ocasión con el equipo especial de buzos de los GEAS, aunque de momento no han podido intervenir debido al mal estado de la mar.
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