Avilés (Asturias), 15 mar.- El grupo de rescate que trabaja en la búsqueda de los cuatro tripulantes que siguen desaparecidos tras el naufragio del pesquero "Santa Ana", ocurrido el lunes frente al Cabo Peñas, procederá mañana a abrir un boquete en el casco del pecio tras recuperar hoy el cadáver del indonesio Suherman Hasan.
El operativo de búsqueda, coincidiendo con la falta de luz natural, ha dado por finalizada hoy su actuación, en la que han tomado parte una treintena de buzos, los cuales han logrado recuperar el cuerpo sin vida de Suherman Hasa, mecánico de 48 años, unos de los dos tripulantes indonesios a borde del buque.
Las tareas de identificación para determinar a cual de los dos indonesios desaparecidos en el siniestro -el mecánico Suherman o el marinero Wasito- correspondía el cuerpo sin vida hallado este mediodía se han prolongado hasta última hora de la tarde.
En este proceso, ha indicado el capitán de la Guardia Civil Carlos Martínez, ha trabajado la Unidad Orgánica de la Policía Nacional en colaboración con la embajada de Indonesia en España.
Martínez ha explicado a los periodistas que durante la tarde el operativo de búsqueda no ha encontrado ni ha logrado ver a ninguno de los cuatro cuerpos de los tripulantes que aún siguen desaparecidos.
Asimismo, ha dicho que han centrado las tareas en tratar de solucionar el problema detectado al descubrir una "atmósfera tóxica" por acumulación de gasóleo en la proa del pecio.
Ante el riesgo de una posible explosión, ha revelado que el grupo de rescate ha decidido un cambio de estrategia para facilitar la entrada en esa zona interior del buque, que han generado rompiendo con mazas las claraboyas y procediendo a la apertura de otros orificios para anular el riesgo explosivo con vistas a la actuación prevista para mañana.
En la jornada dominical llevarán a cabo un corte en el costado estribor, a la altura del puente de navegación del "Santa Ana", coincidiendo con un camarote, de un tamaño aproximado de un metro y medio cuadrado.
Ha precisado que esta maniobra será acometida con una lanza térmica, que se alimenta de oxígeno, que puede alcanzar temperaturas de más de 5.000 grados.
La apertura de la vía de acceso al pesquero va a facilitar la posibilidad de desescombro en el barco, que contiene 2.500 cajas de pescado, con el objetivo de rescatar los cuerpos de los tripulantes desaparecidos.
Martínez ha solicitado a los periodistas que trasladen el agradecimiento de la totalidad de los integrantes que conforman el dispositivo de rescate por las numerosas muestras de agradecimiento y apoyo que están recibiendo a través de distintos medios por la actuación que llevan a cabo.
Coincidiendo con el sexto día en el que el grupo de rescate prosigue las labores de búsqueda de los tripulantes desaparecidos, el director de Operaciones de Salvamento Marítimo, Joaquín Maceiras, ha apuntado que no se descarta la posibilidad de que alguno de los cuerpos no se encuentre en el interior del pesquero, por lo que se mantiene el dispositivo aéreo y marítimo.
Tras el naufragio sólo pudo rescatarse con vida al segundo patrón del barco, Manuel Simal Sande, de 50 años y vecino de la localidad coruñesa de Muros, mientras que los cadáveres del primer patrón, el portugués Francisco Gomes Fragateiro, y del cocinero Manuel Indalecio Mayo Brea, natural de Muros, fueron recuperados en las primeras horas del rescate.
Otros dos cuerpos sin vida, el del marinero gallego Lucas José Mayo y el mecánico indonesio Suherman Hasan, fueron rescatados ayer y hoy, respectivamente.
Siguen desaparecidos el gallego Manuel María Tajes (mecánico); el joven asturiano Marcos del Agua Chacón, alumno en prácticas; el contramaestre portugués Víctor José Farinhas Braga, y el marinero indonesio Wasito. EFE
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