Logroño, 3 dic.- El Naturhouse La Rioja ha encajado hoy una derrota lógica ante el Kiel (30-34) pero ha reforzado su imagen gracias a un juego notable, con el que ha sucumbido por unos momentos de dudas y, sobre todo, porque enfrente ha tenido a un jugador sobresaliente, Joan Cañellas.
El internacional español anotó 11 goles y protagonizó el choque por completo no solo por esa cifra sino por cuando sumó sus goles, en muchos momentos en los que el Kiel necesitaba una referencia y la encontró en él.
El primer tiempo fue trepidante tuvo momentos de balonmano de alto nivel, como corresponde al Kiel y como se espera del Naturhouse.
Pero la distancia que separa a las dos plantillas está marcada por la precisión. El Kiel tuvo la que se supone en uno de los dominadores del balonmano continental. Y el Naturhouse quedó en evidencia, en ese aspecto, en media docena de balones perdidos o pases a ninguna parte, que le hicieron ceder terreno.
Así, en la primera mitad el choque solo se decantó por eso, porque la intensidad defensiva fue alta en los dos conjuntos, más en el Naturhouse, y en ataque mientras que los riojanos asumieron más responsabilidad colectiva, en el Kiel fue Cañellas dio a su equipo una gran confianza, al anotar los cuatro primeros tantos.
La aportación del catalán y las paradas del sueco Johan Sjostrand fueron determinantes para que el Kiel entrara en el partido poco a poco y, mientras afinaba, no se viera con el marcador en contra.
Con todo, el equipo alemán nunca estuvo cómodo antes del descanso y no logró una renta mayor de los tres goles con los que llegó al descanso (11-14).
El inicio del segundo periodo puso fin al partido o, por lo menos, complicó mucho el papel del Naturhouse. El conjunto alemán exhibió su "fondo de armario", dio más responsabilidad a otros jugadores, como el croata Duvnjak, que marcó tres goles consecutivos mientras el Naturhouse no conseguía entrar en juego.
Así, en apenas diez minutos el partido pareció quedar finalizado (14-21) y al Naturhouse no le quedó más remedio que recurrir a la épica.
Lo hizo liderado por Petrus y Aguinagalde, y redujo la distancia hasta cuatro goles (18-22) en los primeros veinte minutos y poco después a dos (23-25) con ocho minutos por delante.
El Kiel pareció inquietarse, pero poco después, las pérdidas de balón del equipo riojano -que jugaba al límite-, las decisiones discutibles de los colegiados y, de nuevo, los goles de Cañellas le devolvieron la tranquilidad justo antes del final del choque.
Ficha:
30.- Naturhouse La Rioja (11+19): Aguinagalde (p), Luisfe (3), Vigo (3), Garabaya (1), Stenmalm (2), Pedro Rodríguez (6), Javier García (1), Gómez Lite (p), Sánchez Migallón, Petrus (4), Juanín García (3p), Ángel Fernández (3), Cacheda (2), Ángel Romero (1) y Eilert (1).
34.- THW Kiel (14+20): Sjostrand (p), Duvnjak (5), Toft Hansen (1), Sprenger (1), Wiencek (4), Cañellas (11), Klein (2), Weinhold (2), Ekberg (1), Lauge, Dahmke, Palmarsson (5) y Vujin (2).
Parciales: 1-2, 4-6, 7-9, 9-11, 10-12, 11-14 (descanso) 12-17, 14-21, 17-22, 22-25, 26-29 y 30-34 (final)
Árbitros: Martin Gjeding y Mads Hansen (Dinamarca). Excluyeron por dos minutos al visitante Toft Hansen.
Incidencias: Unos 3.700 espectadores en el Palacio de los Deportes de La Rioja en el encuentro de la octava jornada de la Liga de Campeones de balonmano.
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