El alcalde de Rio de Janeiro discutirá este lunes con los jefes del Comité Paralímpico Internacional medidas que garanticen la realización de los Juegos en setiembre, tras un fallo judicial que bloquea transferencias de dinero del gobierno estatal a Rio-2016.
"El alcalde Eduardo Paes se reúne este lunes con el presidente del Comité Paralímpico Internacional, Philip Craven, y con el CEO Xavier González. Van a discutir medidas que garantizarán la realización de los Juegos Paralímpicos de Rio-2016, que comienzan el día 7 de setiembre", dijo la alcaldía de la ciudad brasileña en un comunicado.
Una jueza federal prohibió el viernes pasado que el gobierno central y el gobierno municipal de Rio transfieran dinero al comité organizador Rio-2016 hasta que sus gastos no sean divulgados públicamente, informó la estatal agencia Brasil.
Todos los gastos deberán ser enviados por Rio-2016 también a la fiscalía federal y al Tribunal de Cuentas de la Unión, aseguró en su decisión la jueza federal Marcia Maria Nunes de Barros, que acató un pedido de la fiscalía reclamando más transparencia en los gastos de dinero público en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Rio.
El Comité organizador Rio-2016 anunció que apelará el fallo.
"No hicimos ningún pedido de nuevo dinero" a las autoridades brasileñas, dijo el domingo a periodistas Mario Andrada, director de Comunicaciones de Rio-2016.
"Aún no recibimos esa decisión judicial. Pero ya adelanto que vamos a apelar, vamos a discutir esa cuestión en los tribunales. Estamos convencidos de que tenemos buenas relaciones con gobiernos y patrocinadores y caminamos para terminar los Juegos Olímpicos y Paralímpicos sin dejar deudas", añadió.
El diario O Globo indicó este domingo que las Olimpíadas no corren riesgo, pero que las Paralimpíadas podrían ser anuladas si no hay recursos de empresas estatales o privadas para Rio-2016.
Según la ley, si hay déficit en las cuentas de Rio-2016 los gobiernos estatal y municipal deben saldar las deudas. Pero Brasil atraviesa su peor recesión en casi un siglo, y los brasileños miran con lupa gastos considerados innecesarios.
Si el fallo de la jueza no es cumplido, la multa diaria asciende a 100.000 reales (31.000 dólares).
Rio de Janeiro se jacta de celebrar unos Juegos "baratos" y sin lujos, con un presupuesto inferior al de otras citas olímpicas.
El presupuesto del comité organizador Rio-2016, que sufrió varios recortes debido a la crisis, cerró en 7.400 millones de reales (2.317 millones de dólares).
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