Antúnez, héroe del Real Madrid campeón de Europa en 1995: "Es una oportunidad única para volver a ser campeones"

    • El exjugador fue el base titular del Real Madrid que ganó a Olympiacos la final en Zaragoza de hace 20 años.
    • "Pablo Laso se merece ganar el título que le falta", afirma.

13 de abril de 1995, Zaragoza. Ese día el Real Madrid conquistó su octava Euroliga y la última hasta la fecha. Dice el tango que 20 años no son nada pero en deporte dos décadas son toda una vida. Aquella noche José Miguel Antúnez (Madrid, 21 de febrero de 1967) subía el balón con inteligencia con el objetivo de crear superioridades para sacar lo máximo de Sabonis y hoy es la voz de la experiencia. Ese equipo que deslumbró a Europa también había probado el fracaso cayendo el año anterior ante el Limoge. Ellos tenían la presión de tocar la gloria tras 15 años de sequía y lograron una victoria homérica después de haber perecido en otra ocasión. Demasiados paralelismos con un equipo de Pablo Laso que puede volver a sentarse en el trono ante Olympiacos, curiosamente el mismo rival al que vencieron los Antúnez, Arlauckas, Sabonis y compañía.

"Es una oportunidad única para volver a ser campeones. ¿Lo merece? Aquí todo el mundo piensa que lo merece. Va a ser un gran partido. Este equipo está ante el escenario perfecto para ganarla y ojalá lo consigamos", aclara el ex jugador del conjunto blanco a este periódico.

Como ya sucediera hace dos décadas, la ansiedad que produce el fracaso continuo mermó a un equipo que acabó convirtiéndose en leyenda. "Llevábamos 15 años sin ganar pero no veníamos de perder tres finales. La primera derrota ante el Limoge fue una decepción tremenda. Había una sequía de títulos que podía provocar cierta ansiedad pero la alegría tras ganar en Zaragoza fue enorme. Fue el mejor momento de mi carrera, sin duda", sigue.

Pero, ¿qué diferencias y similitudes hay entre estos dos equipos? "Nosotros teníamos a dos jugadores sobre los que pivotaba nuestro juego. Era un equipo muy bien formado para sacar el máximo rendimiento a los jugadores. Ellos tienes más profundidad de banquillo, le meten un ritmo más fuerte al partido y les gusta correr. Sus virtudes están en los exteriores".

El Real Madrid de 2015 y 1995 son diferentes con respecto a su estilo de juego pero el objetivo es el mismo. "Este es el mejor Real Madrid de los últimos años pero no creo que sea mejor que el nuestro. Nosotros teníamos un equipo muy bien armado a partir de Sabonis que era el mejor jugador de Europa y era absolutamente determinante", afirma.

"Que tire cualquiera menos Spanoulis"

Vassilis Spanoluis es lo más parecido a un Dios griego sobre la faz de la tierra. En la semifinal ante el todopoderoso CSKA había fallado sus 11 primeros tiros pero resucitó de la nada para llevar a Olympiacos a la final tras un último cuarto de película donde anotó 11 puntos.

"Son un equipo muy duro y hay que parar a Spanoulis porque se lo va a jugar todo. ¿Cómo se le para? Hay que hacerle un dos contra uno. El CSKA le estaba haciendo un uno contra uno y ahí tienes todas las de perder. Que tire cualquiera menos él", espeta el base que siente devoción por un Sergio Rodríguez que debe llevar al Real Madrid a lo más alto. "Él es el auténtico motor de este equipo. Su juego me encanta. También hay que destacar a Llull y Felipe Reyes que son el alma de este equipo", finaliza.

La Euroliga es el único título que le falta a un Pablo Laso que es el padre del éxito de un equipo que lleva tres años en lo más alto. "Hay que reconocerle el éxito, lo está haciendo muy bien. Ojalá gané el único título que le falta. Se veía venir desde hace años que quería ser entrenador. Cuando era jugador era un loco de las tácticas. Hay jugadores que se les ve que van a acabar ahí", dice un Antúnez, que piensa lo mismo que hace 20 años: "Vamos a ganar".

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