Messi saltó al campo y no necesitó su mejor versión, solo un poco de su toque mágico para dar la victoria al Barcelona. El equipo azulgrana estaba completando un encuentro anodino en el Camp Nou ante el Betis y solo el factor diferencial de Messi pudo hacer que el Barça ganase el partido.
El equipo de Tito Vilanova empezó el encuentro con el ambiente y las piernas de la última decepción europea. Las cabezas tampoco estaban centradas y esa falta de concentración la pagó el Barça. Un error en cadena en un balón sin peligro en el mediocampo se convirtió en el primer gol en contra. Era todavía el minuto uno cuando Pabón introdujo la pelota en la meta defendida por Pinto.
Los primeros pitos colectivos del Camp Nou al equipo en mucho tiempo hicieron reaccionar al equipo. Pese a que seguían las imprecisiones en los azulgranas, apareció el talento individual para rescatar al equipo. Apenas unos minutos del gol del Betis, Alexis empató tras un servicio fabuloso de Andrés Iniesta.
Pese a lo rápido que fue el empate, el Barcelona seguía sin dar buenas señales. Song no se entendía con los centrales, los atacantes del Betis se encontraban importantes desajustes y para colmo Villa no dejaba de fallar en el área contraria. Los pitos colectivos se convirtieron en individuales cuando el asturiano marró su cuarta ocasión clara.
Las más de 60.000 personas que habían acudido al Camp Nou se empezaban a impacientar y quería ver algo de talento. Cuando Tello se sacó un gran tiro desde fuera del área, que por un instante pareció gol, la grada empezó a corear el nombre del canterano. Solo la marcha extra de Tello desataba aplausos.
El Betis estaba dispuesto a sacar partido de la pasividad de los jugadores azulgranas y del revuelto ambiente del Camp Nou. Un trallazo desde fuera del área de Rubén Pérez adelantaba de nuevo a los andaluces.
Messi calentaba y Villa apuró sus opciones para no ser el sustituido. Anotó su gol de cabeza y lo celebró con rabia, pero no fue suficiente: su dorsal fue el señalado.
Con Messi todo cambió. No necesitó hacer jugadas espectaculares esta vez, uno de los primeros balones que iba a tocar, casi sin entrar en juego era una falta al borde del área. El argentino, frío, casi sin querer, la puso en la escuadra. El Barça ya estaba por delante.
El Betis experimentó el miedo escénico de tener en frente al mejor jugador del mundo y dio un paso atrás. Una jugada de tiralíneas del Barcelona, en fuera de juego, la remató Messi a la red. En apenas unos minutos el Barcelona había dado un paso fundamental hacia el título de la mano de Messi, el argentino ha marcado el 55 % de los goles del equipo de la Ciudad Condal (dato de @Optajose). De nuevo un poco de Messi fue mucho.
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