Benítez tiene que hacer de mediador para que Sergio Ramos no se marche

    • Es el papel que tiene que hacer el entrenador para conservar al queconsidera un jugador irreemplazable y que puede convertirse en el capitán si se confirma la salida de Casillas
    • El Real Madrid no quiere vender a Sergio Ramos, pero si las posturas siguen alejadas y la relación no mejora, el precio del traspaso estaría en los100 millones de euros
Sergio Ramos tiene pendiente sentarse a hablar con Florentino Pérez.
Sergio Ramos tiene pendiente sentarse a hablar con Florentino Pérez.

El 'caso Sergio Ramos' pasa ahora porque Rafa Benítez haga de mediador para hacerle entender al jugador que no va a estar en otro sitio mejor valorado y más querido que en el Real Madrid. Es el papel que tiene que hacer el nuevo entrenador para conservar al que considera uno de los jugadores irreemplazables en el equipo y el que puede convertirse en el capitán si se confirma la salida de Casillas.

Después de la reunión entre Sergio Ramos y José Ángel Sánchez (director general ejecutivo del club) en la Ciudad Deportiva de Valdebebas con el objetivo de parar el fuego cruzado y pedirse que se juegue limpio hay dos pasos a seguir. Uno es la charla que va a tener Benítez con el central para ratificarle que es imprescindible y otro es la intervención de Florentino Pérez en este asunto, que se producirá en un momento de la pretemporada. El presidente y el jugador tienen pendiente un cara a cara para decidir definitivamente si hay renovación o se acepta una posible oferta. Según el club, si se pone a Ramos en el mercado la cantidad tendría que ser irrechazable y para salir debería tener tres cifras.

El Real Madrid no quiere vender a Sergio Ramos, pero si las posturas siguen alejadas y la relación no mejora, el precio del traspaso estaría en los 100 millones de euros. Antes de llegar a esta situación se hace imprescindible la intervención de Benítez que, como José Ángel Sánchez, allanarían el terreno a Florentino Pérez. El entrenador tiene la misión de transmitirle el apoyo y el respaldo del club desde el punto de vista deportivo. El económico es cuestión del presidente. El cariño se recupera con un apretón de manos entre Ramos y Florentino.

Sergio Ramos no es el mismo caso que Özil ni Di María para el Real Madrid. No está en venta ni se quieren escuchar ofertas por el central. Florentino le quiere renovar y dentro de la negociación cada parte defiende sus intereses. El acuerdo pasa porque Ramos recupere la confianza del club y para ello también es importante la actuación de Benítez.

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