Benzema se luce y reivindica pero no termina con la maldición de Gerland

La duda previa al encuentro era saber el delantero por el que apostaría Mourinho Adebayor fue el elegido y Karim se tuvo que hacer a la idea de que vería el enfrentamiento desde el banquillo.

Tras una primera parte mala, en la que ninguno de los dos equipos dominó o creó peligro, el entrenador blanco retiró al delantero togolés y dio su oportunidad a Benzema, que recibió una calurosa ovación de la que fue su afición. Desde el primer momento se le vio especialmente motivado, ya que fue a presionar rápidamente al jugador rival que tenía el balón. Dentro de su frialdad, se le notó "picado".

Hay noches que están escritas para que uno sea protagonista, y en la del martes había muchas señales que indicaban que estaba destinada para el ariete galo. Y lo fue, porque anotó el gol madridista. Un gol con historia: es el primer tanto del equipo madridista en cuatro visitas al estadio del Olympique de Lyon, Gerland. Benzemá finalizó una gran jugada colectiva con Özil y Cristiano Ronaldo, cuando apenas llevaba tres minutos sobre el césped.

La noche no fue completa de felicidad porque el tanto de Gomis la amargó. Mourinho no logró romper el maleficio de Gerland con este empate, ya que los blancos siguen sin lograr la victoria, pero Benzema se reivindicó con su quinto tanto en la Champions, con el que iguala su mejor registro en esta competición. Y de paso, le dio una gran alegría a Florentino Pérez, que saltó en el palco con su tanto, algo pocas veces vistas.