Con el cuerpo en Neptuno y el alma en Lisboa: así celebraron la Liga los héroes del Atlético

    • Un ambiente de suspense, pero a la vez de convencimiento, sobrevoló al dios del mar en la celebración del título liguero.
    • La felicidad desbordada y el sueño de ganar la Champions se tradujo en una mezcla de sensaciones encontradas.

'Yo me voy al Manzanares, al estadio Vicente Calderón'... es la primera estrofa del himno que miles de aficionados del Atlético de Madrid se tomaron al pie de la letra para iniciar la celebración. Una marea rojiblanca se acercó hasta el estadio para agasajar a los jugadores que les han hecho campeones de Liga 18 años después. Los primeros en llegar, poco después de las tres de la tarde y cuando aún se montaban los puestos de venta de bunfandas y banderas rojiblancas, un padre y un niño que esperaban con ilusión la llegada de sus ídolos.

Tuvieron que esperar hasta eso de las siete de la tarde, hora en la que comenzaron a llegar los nuevos héroes del Atlético para comenzar la fiesta. El Paseo de los Meláncolicos ya estaba totalmente tomado por los miles de aficionados que agradecían a sus jugadores el esfuerzo realizado para tumbar a los dos colosos de la Liga. Madrid y Barcelona han claudicado esta temporada ante los 'Guerreros del Cholo'.

Todos y cada uno de los jugadores eran recibidos en los aledaños del Calderón por unos hinchas que latido a latido, como reza el nuevo lema del Atleti campeón, jaleaban sus nombres con las gargantas rotas. Las caras de los más pequeños impresionaban, las emociones estaban a flor de piel y todos estallaron con la aparición del 'Cholo'.

Los atléticos siguen el camino que marca Simeone. Nadie duda en la frase de 'partido a partido' y ya en la celebración se pidió el último esfuerzo a los jugadores. Un ambiente de suspense, pero a la vez de convencimiento, sobrevolaba al dios del mar y es que todos piensan ya en el próximo sábado. Están ante una oportunidad única de reinar en el fútbol. Ganar la final de la Champions en su próximo objetivo y después de 40 años están a un solo partido. Los aficionados lo saben y se han encargado de recordárselo. Sueñan con repetir aquello que pusieron de moda en la final de Copa y de una vez por todas quieren 'que se enteren los vikingos, quién manda en la capital'.

VÍTORES EN EL PASEO DE PRADO Y EXPLOSIÓN EN NEPTUNO

En esta ocasión el recorrido fue diferente al habitual, ya que la expedición rojiblanca no fue agasajada por las instituciones madrileñas. El autobús estuvo cortejado por cientos de aficionados que hicieron el recorrido completo, unos a pie y otros en moto. Desde Atocha ya se adivinaba una marea rojiblanca que cantaba una y otra vez a su líder espiritual: ''Ole, ole, ole, Cholo Simeone'.

Todos recibieron el apoyo de los hinchas, que se dejaron las gargantas cuando al final del desfile saltaron al escenario y quien se llevó gran parte del protagonismo fue Godín, autor del tanto del empate ante el Barcelona, que finalmente dio el título de liga a los suyos. El uruguayo tiene su propia canción desde hace unas temporadas y fue una de las que más retumbó en Neptuno.

Gabi es el alma del equipo, es Simeone dentro del campo. El capitán fue uno de los jugadores que mostró estar más emocionado y se atrevió a coger el micrófono: 'No tengo palabras para decir lo que siento. Es un honor estar aquí y compartir vestuario con esta gente. Esto es un premio al trabajo, al sacrificio, al amor con unos colores que no se compran. Esto acaba de empezar, lo mejor está por venir'.

Sobre las 22.00 horas, los aficionados comenzaron a abandonar la zona y los jugadores dieron por finalizada la fiesta, no sin antes entonar los cánticos que tantas veces se han escuchado en el Vicente Calderón, el himno puso los pelos de punta a más de uno y dejaron un claro mensaje: 'Dale alegría a mi corazón, la Liga de Campeones es mi obsesión'.

SUEÑAN CON VOLVER EL SÁBADO... CON LA PRIMERA

Los aficionados más veteranos que disfrutaron en Neptuno vuelven a sentir que su equipo está entre los más grandes. Hace años el equipo luchaba por todos los títulos, copaba las portadas de los periódicos y abría los telediarios. Gracias a dos mágicos 17 de mayo y seis títulos en cuatro años, sienten que han vuelto a ganarse el respeto de todos.

Ya piensan en el 24 de mayo. 20:45 horas. La final de la Champions contra el eterno rival. La motivación ya viene dada por el partido. Quedan seis días y ya hay nervios. La lesión de Diego Costa y sus lágrimas fueron las de todos los atléticos, pero la demostración de personalidad del equipo en el Camp Nou ha logrado que la esperanza no decaiga por la ausencia de su estrella. En Neptuno retumbaba una y otra vez la misma frase: 'Con Simeone todo es posible'. El mensaje de los aficioandos ya está lanzado, ahora los jugadores tienen que recoger el 'guante'.

El primero en hacerles creer será Simeone en cuanto el balón vuelva a rodar en la Ciudad Deportiva de Majadahonda. Casi ningún componente de la plantilla del Atlético se atrevió a hablar en público de la final de la Champions. Y digo casi ninguno porque Koke, ausente en la pasarela de Neptuno, dejó un mensaje en Twitter: 'Ojalá volvamos en una semana'. Vuela Atleti, vuela alto...

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