David de la Cruz despierta de su sueño en el Tour

  • David de la Cruz (Sabadell, 25 años) cumplirá en el Tour de Francia un sueño que se inició apenas hace 7 años, cuando con el sueldo que ganaba trabajando en un supermercado se compró su primera bicicleta.

Leeds (Reino Unido), 3 jul.- David de la Cruz (Sabadell, 25 años) cumplirá en el Tour de Francia un sueño que se inició apenas hace 7 años, cuando con el sueldo que ganaba trabajando en un supermercado se compró su primera bicicleta.

Sin tradición ciclista en su familia, afrontará "sin presión y con una ilusión enorme" la mejor carrera del mundo. "En casa me dejaron hacer, y ahora están todos en una nube", dice el ciclista del equipo alemán Netapp.

El corredor vallesano apenas sabía qué era una bicicleta con 18 años, pero en una mañana que hizo "campana" en el instituto vio en un escaparate una bici de 500 euros que le cambió la vida.

En un suspiro empezó a rodar, y a destacar, en un grupo de aficionados. Sin destacar en categorías inferiores se fijó en él el Caja Rural y en 2010 ya era profesional. Tres años después, tras conseguir puestos de honor en Vuelta a Asturias y Castilla y León fue su actual equipo, el Netapp alemán quien apuntó su nombre.

Alguien habló de sus posibilidades futuras: un tal Joaquim Rodríguez, "Purito", su paisano, amigo, consejero, un maestro que le aporta valiosos consejos. "Me dice que en ciclismo todo importa, y que cien es la suma de uno, más uno, más uno...., y eso me parece muy acertado", dice.

Ahora De la cruz hace la maleta para empezar el sábado en Leeds. La noticia se la esperaba, pero otra cosa fue la confirmación.

"Es una alegría inmensa. El Tour es lo máximo, la mejor carrera. Cuando me compré la primera bici el sueño que tenía era participar algún día en esta carrera. He tenido suerte, pero a eso hay que unir cualidades y mucho trabajo", señala De la Cruz.

Un caso particular el de David de la Cruz. Se trata de un deportista completo, que practicaba atletismo, le gustaba los 3.000 obstáculos), baloncesto...pero en su casa jamás vio una bicicleta. Ni se ponía la tele ni se comentaba nada sobre ciclista alguno.

"Yo no tengo tradición ciclista. En mi casa nadie montaba en bicicleta, y yo practicaba varios deportes, pero de ciclismo nada. Siquiera conocía a ciclistas famosos. Me preguntaban por Eddy Merckx y no sabía quién era. Parecía una falta de respeto. Y cuando empecé a competir no conocía a muchos corredores", recuerda.

Aquel desinterés ha cambiado en casa de David. "Mis padres me dejaban hacer, y yo iba a mi aire. Ahora están todos en una nube. Ahora sí me siguen".

El corredor del Netapp asegura que no siente presión ante su debut. "Tal vez será porque aún no me creo que vaya a ir al Tour, pero supongo que ya aflorarán los nervios a medida que se acerque el sábado. Trataré de disfrutar de una carrera que es única".

Su función dentro del NetApp será ayudar al checo Konig, que será el encargado de luchar por la general, y luego aprovechar alguna oportunidad si se presenta.

De la Cruz ya tiene en la cabeza el recorrido del Tour. "Lo más duro llegará al final, con los Pirineos y la crono, pero atención a la primera semana, que será nerviosa, con una "miniLieja" el segundo día y luego en la quinta el pavé", avisa.

El sábado se concretará su sueño en Leeds. Allí estarán los Alberto Contador, Chris Froome y su espejo, su paisano Joaquim "Purito" Rodríguez, quien no regatea elogios para su amigo.

"Va bien en todos los terrenos, es bueno contrarreloj y sube bien. Tiene margen de mejora. Desde que lo vi me encantó. Sabe preguntar y escuchar, quiere aprender. Eso es muy bueno. No me importaría tenerlo en mi equipo para que aprendiera", dice "Purito".

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