Del Bosque premia a Aragonés con su silencio y un Príncipe de Asturias

Un gesto de caballero y deportista de elite. El entrenador de la selección española, Vicente del Bosque, ha recogido este viernes el premio Príncipe de Asturias al mérito deportivo y, saltándose todas las normas de protocolo, se ha aproximado a las butacas laterales y ha pedido a su antecesor, Luis Aragonés, que compartiera el galardón con el resto.

La actitud de Del Bosque no resultaría especial si no fuera por algunas de las afirmaciones de Aragonés durante los primeros partidos de la selección española. El antiguo míster del combinado nacional fue contratado por la cadena Al Jazeera para retransmitir el Mundial de Fútbol de Sudáfrica. Tras la derrota contra Suiza por la mínima, afirmó que España no había jugado bien y que 'el problema viene de lejos, no es de ayer2026', en una clara alusión al cambio de rumbo entre su etapa como seleccionador y la de Del Bosque.

Las palabras de Aragonés despertaron una fuerte polémica y fueron recibidas como un ataque a la posición de Del Bosque, posiblemente en el peor momento de la selección desde que se convirtiera en campeona de Europa bajo la dirección de Aragonés. Ante la afirmación del míster, el actual seleccionar nacional prefirió callarse y evitar el choque. Ése fue el primer gesto caballeroso con su antecesor.

Frente a Honduras, el segundo partido de la fase de grupos, España venció 2-0 a Honduras, pero tampoco entonces el juego del combinado nacional sedujo a Aragonés. El 22 de junio, el míster señalaba que 'el juego de España no me deja tranquilo'. Del Bosque siempre comprendió que el fútbol es opinable y que ninguna afirmación alteraría su plan.

Contra Chile, el análisis de Aragonés se suavizó, pero seguía sin ver a la España de Del Bosque al nivel de la dirigida por él mismo. Entonces, después de vencer a la selección sudamericana por 2-1 y conseguir el pase a octavos, el ex entrenador de equipos como el Atlético de Madrid o el Betis señaló que España había mejorado, 'pero no lo suficiente'.

Sólo después de que España ganara a Alemania en semifinales, Aragonés reconoció el buen planeamiento del entrenador salmantino. Lo mismo hizo tras la victoria final y la consecución del campeonato del Mundo. Del Bosque siempre apaciguó las posibles tensiones con el silencioy ahora las cierra definitivamente con un gesto de caballero y deportista de elite.