El aventurero español intentará cruzar en bicicleta el helado lago Baikal

Moscú.- El deportista español Juan Menéndez Granados intentará cruzar en bicicleta el legendario lago Baikal (Siberia), cubierto en esta época del año por una gruesa capa de hielo.

"Es la aventura más complicada y peligrosa que he intentado. El hielo es impredecible y las temperaturas rondan los 15 grados bajo cero", señaló a Efe Menéndez, un asturiano de 27 años.

El ciclista, que se encuentra ahora entrenando en el mismo lago para acostumbrarse al hielo y al gélido viento siberiano, invertirá entre 12 y 14 días en recorrerse los 650 kilómetros que separan las localidades de Kultuk (extremo sur) de Severobaikalsk (extremo norte).

"Tendré que esquivar algunos obstáculos en el camino, como montañas de nieve, así que en realidad pedalearé durante más de 700 kilómetros", dijo.

Menéndez viajará de día y descansará de noche en una tienda de campaña, tiempo que aprovechará para mantener informados en tiempo real a sus seguidores en su página web (www.juanmenendezgranados.com).

En su última entrada, comenta que hoy rodó 12 kilómetros por el lago con las alforjas (mochila, cámaras, comida, hornillo, combustible y demás equipo) que llevará durante la travesía y que se le "congelaban las manos" cuando tomó unas fotos.

"El hielo puede tener hasta un metro de grosor, pero hay que tener mucho cuidado. Cuando anochece y bajan las temperaturas se pueden oír los crujidos del hielo. A uno le dan escalofríos", señaló en conversación telefónica.

El aventurero, que considera al Baikal un lugar ideal para los aficionados al "ice biking" (ciclismo sobre hielo), ya que hace mucho frío y nieva poco, lo que facilita el pedaleo, explica que es muy diferente andar sobre dos ruedas por carretera, que por el hielo.

"Vas mucho más despacio, ya que tienes que llevar neumáticos con clavos. No se pueden recorrer más de 50 kilómetros diarios a menos de 10 kilómetros por hora. Cuando sopla el viento, tienes la sensación térmica de que estás a 30 grados bajo cero", apunta.

El español, que descansa antes de iniciar su odisea en un modesto albergue en la localidad de Lystvyanka, a orillas del lago, recuerda que en el Ártico canadiense había pistas, pero en el Baikal el plan es rodar por el centro del lago más profundo del planeta.

Con una superficie de 31.500 kilómetros cuadrados, 636 kilómetros de largo y 23.400 kilómetros cúbicos de agua, el Baikal supera con creces el volumen conjunto de agua de los cinco Grandes Lagos de Estados Unidos y Canadá.

En 2009, Menéndez ya se recorrió de norte a sur los 4.000 kilómetros de la cordillera de los Urales, que separa la parte europea de Rusia de Siberia, durante más de cuatro meses.

"Llegué hasta Vorkutá" -ciudad trágicamente famosa ya que acogió los campos de trabajo soviéticos (Gulag)-, dijo el aventurero, quien también se recorrió la Amazonia, Escandinavia y los desiertos australianos.

Menéndez cuenta con el respaldo de la Sociedad Geográfica Española y la Dirección General de Deportes del Principado de Asturias, pero debe pagar de su propio bolsillo más de la mitad de los costes de su aventura siberiana.

Su próxima expedición volverá a poner a prueba su resistencia física, aunque las condiciones climatológicas serán completamente opuestas, ya que intentará cruzar el desierto del Sáhara, el lugar más inhóspito sobre la faz de la tierra.