El Bizkaia necesita ganar el duelo vasco para estar en el 'Top 16'

Bilbao, 19 dic.- El Gescrap Bizkaia necesita ganar mañana en el Bilbao Arena de Miribilla (20:00 horas) un duelo histórico ante el Caja Laboral para estar en el 'Top 16' de la Euroliga, algo que supondría un hito más en la corta historia de un club que apenas tiene once años de vida.

Ese encuentro será el más relevante que haya enfrentado nunca en competición europea a dos equipos vascos, que ya se midieron en la primera vuelta en Vitoria con triunfo del equipo bilbaíno.

Esa victoria en el Iradier Arena es precisamente la que le da opciones de clasificación mañana con solo ganar el partido, ya que, de hacerlo, empataría a cinco victorias con el Caja Laboral, al que, obviamente, superaría en los enfrentamientos entre ambos equipos. Y, además, le permite tener ventaja en el resto de múltiples empates que pueden darse, siempre con ambos equipos de por medio.

La máxima dificultad del choque para los de Fotis Katsikaris radica, no obstante, en medirse a un rival que acostumbra a ganarle los choques decisivos y con gran experiencia en este tipo de encuentros en la Euroliga, donde el conjunto bilbaíno es novato.

El Baskonia ha ganado al Bizkaia en las cinco veces que se han medido en un choque a vida o muerte: tres en la Copa del Rey, en 2008 en la capital alavesa en semifinales y en 2010 en Bilbao y en 2011 en Madrid, en ambas en cuartos de final; y dos en la Supercopa, ambas en cancha vizcaína, la final de 2007 y en semifinales en 2011.

De todos modos, los hombres de negro contarán mañana con la ventaja de jugar su afición y al abrigo del llamado 'efecto Miribilla', el que le impulsó la temporada pasada a lograr el subcampeonato liguero ganando tres veces seguidas al Real Madrid y que concitará a cerca de 10.000 gargantas dispuestas a llevar en volandas a su equipo.

También tendrá el Bizkaia el añadido anímico que le insufló la gesta de la pasada semana en Estambul, donde casi apabulló contra pronóstico a un Fenerbahce Ulker que tiene sus miras puestas en el una Final Four que se jugará en la capital turca.

Ese triunfo le salvó de quedar eliminado y le dio la opción de "seguir haciendo historia", como ha dicho Marko Banic, en el derbi vasco más histórico que se recuerda.