Roma, 9 abr.- Un Juventus de Turín exultante tras arrebatar al Milán el liderazgo de la primera división del fútbol italiano (Serie A) se enfrenta este miércoles al Lazio, tercero en la tabla, que no quiere perder ese puesto, lo que obligará a los turineses a redoblar esfuerzos para mantener la primera posición.
El triunfo el pasado sábado en Palermo frente al club siciliano por 0-2 encaramó a la "Vecchia Signora", como es conocido el club piamontés, al primer puesto de la liga, desbancando al Milán de Berlusconi por un punto de diferencia.
Ese punto (65 el Juventus y 64 el Milan) pretende mantenerlo y si es posible aumentarlo en tres más, pero antes tendrá que doblegar a un Lazio que se encuentra en un buen momento tras ganar al Nápoles por 3-1 el pasado sábado y que no está dispuesto a volver de Turín con la cabeza baja.
El Milán, que no levanta cabeza tras salir de la Liga de Campeones y perder ante el Fiorentina, busca la revancha y recuperar el liderazgo ganando a un Chievo que es noveno en la tabla, pero que viaja a Milán confortado ante el triunfo en su casa frente al Catania por 3-2.
A pesar del tropezón, el técnico del Milán, Massimiliano Allegri, no se desespera y está convencido de que el campeonato aún es largo (falta siete jornadas para el final) y pueden volver a recuperar el liderazgo.
"Estamos un punto por detrás del Juventus, por lo que el partido del miércoles es importante. Preferiría ir por delante, pero no es así, pero tampoco todo ha acabado. El campeonato aún es lago y no estoy preocupado", afirmó hoy Allegri.
El técnico negó que estuvieran cansados por el partido contra el Barcelona y señaló que perdieron porque el Fiorentina hizo un buen partido y ellos no tuvieron un buen día".
Sobre el Chievo resaltó que está en buen momento, en buenas condiciones físicas y mentales.
El Udinese, cuarto en la tabla, le pisa los pies al Lazio y un tropezón de los laciales en Milán le asentaría en "zona Champions", pero antes tendrá que ganar a un Roma del español Luis Enrique que vive horas bajas tras la derrota del pasado sábado frente al Lecce, pero que es sexto en la tabla y no está dispuesta a hundirse.
El Nápoles, quinto en la tabla, que llega de una derrota contra el Lazio, recibe en casa al Atalanta, también en horas bajas, pero el equipo de Cavani y Lavezzi espera una caída del Udinese y adelantarle, para colocarse en zona de liga de campeones.
La 32 jornada de liga comenzará mañana, martes, con Chievo Verona-Milan.
El miércoles se disputarán Fiorentina-Palermo, Inter Milán-Siena, Nápoles-Atalanta, Roma-Udinese, Catania-Lecce, Génova-Cesena, Juventus Turín-Lazio, Parma-Novara.
Bolonia-Cagliari cerrará la jornada liguera el jueves, 13.
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