España tardó diez minutos en entrar en el partido, un cuarto que aprovechó la Eslovenia de Bozidar Maljkovic para marcharse en el electrónico 16-23. Y no fueron más porque los árbitros anularon un triple esloveno sobre la bocina. (Así lo seguimos en directo)
España cambió a zona en el segundo cuarto y las cosas cambiaron radicalmente. Eslovenia no encontraba los huecos para penetrar la fortísima defensa española y entre Marc y Pau Gasol se bastaron para cargar de personales a los pívots rivales y dar la vuelta al marcador. Tras ponerse por primera vez por delante en el minuto 19 (29-28), España se iba al descanso ganando 35-31.
Festival tras el descanso
España fue un vendabal en la segunda parte: un parcial de 19-2 abrió la brecha hasta los veinte puntos y sentenció un partido que nunca debió peligrar para el combinado nacional. Los 36 puntos anotados en ese periodo dan una muestra de la sangría que Maljkovic no pudo parar (71-45).
La mala noticia llegó poco antes del final del tercer cuarto, cuando José Manuel Calderón tenía que retirarse al banquillo tras torcerse el tobillo. Su cara de dolor no hace presagiar nada bueno de cara al partido de semifinales del próximo viernes.
Con un Navarro absolutamente inspirado, el último cuarto fue un paseo militar para España, que conservó su ventaja y dio minutos a los menos habituales. El resultado final, 86-64, simple reflejo de la diferencia entre ambos equipos. El penúltimo rival del torneo será Lituania o Macedonia, pero la ÑBA ya tiene un récord en su haber: es la única selección que ha estado en las semifinales de los últimos siete Campeonatos de Europa. Casi nada.
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