Gijón continúa marcado a hierro y fuego en la memoria de la afición argelina

  • Gijón, en el norte de España, continúa marcado a hierro y fuego en las mentes de los aficionados argelinos desde hace 32 años. Allí, los Verdes lograron la hazaña de vencer a Alemania (2-1) y allí fueron testigos de un pacto no escrito entre germanos y austríacos que dejó fuera a Argelia de la segunda fase del mundial de España '82.

Argel, 30 jun.- Gijón, en el norte de España, continúa marcado a hierro y fuego en las mentes de los aficionados argelinos desde hace 32 años. Allí, los Verdes lograron la hazaña de vencer a Alemania (2-1) y allí fueron testigos de un pacto no escrito entre germanos y austríacos que dejó fuera a Argelia de la segunda fase del mundial de España '82.

"Gijón continúa en el recuerdo... Dadnos una alegría muchachos", titula hoy el diario oficialista argelino Al Nahar, pocas horas antes del encuentro que enfrentará hoy a Argelia y a Alemania en el partido de octavos de final del mundial de Brasil.

"Argelia-Alemania: Un partido sobre el signo de la venganza", destaca la publicación deportiva francófona Compétition, que asegura que ningún aficionado olvida el daño "irreparable" que hicieron Alemania y Austria en Gijón en 1982 cuando en el último partido de la fase de clasificación pactaron un 1-0 a favor de Alemania que dio el pase a los dos equipos en detrimento de los Zorros del desierto.

Corría el mes de julio de 1982 y Argelia, en su estreno mundialista, había sido encuadrada en el Grupo 2 junto a Alemania, Austria y Chile, que se citaron a duelo en los dos grandes estadios del fútbol asturiano, El Molinón, en Gijón, y el antiguo Carlos Tartiere, en Oviedo.

Los Fenecos, aunque cayeron derrotados ante Austria (2-0), batieron 2-1 a Alemania en El Molinón y 3-2 a Chile en el Tartiere.

El último partido del grupo, jugado el 25 de junio de 1982, enfrentaba a Alemania, que tenía solo dos puntos, y a Austria que había salido victoriosa de sus dos lides anteriores.

Argelia, que había jugado su último partido de grupo contra Chile un día antes, le valía cualquier resultado para clasificarse, excepto una victoria de Alemania por un gol de diferencia, lo que supondría la clasificación automática de los dos equipos europeos.

La manifiesta laxitud y dejadez de ambos equipos tras un temprano gol del alemán Horst Hrubesch en el minuto 10, desató el malestar del público del encuentro, de los aficionados argelinos y del mundo del fútbol en general.

Tras el polémico duelo, la FIFA decidió que los últimos encuentros de la fase de clasificación se jugaran de manera simultánea para evitar que volviera a repetirse la historia.

Pero Argelia "no olvida a Austria", sostiene el diario argelino Competition.

Mohamed, aunque solo tenía ocho años el día del debut de Argelia en el mundial de España, asegura recordar la alegría que estalló en su casa cuando Argelia se impuso a Alemania.

"Es inolvidable, se vivió una alegría popular en todas las calles de Argel. No entendía muy bien lo que estaba pasando, me sentía totalmente conmovido escuchando los gritos de alegría acompañados de las albórbolas (gritos de júbilo) de las mujeres desde los balcones", relató Mohamed.

Ayer en un mensaje escrito dirigido a la selección, el presidente Abdelaziz Buteflika aseguraba: "No me puedo creer que vosotros no podáis repetir la hazaña de los que os precedieron, un día de 1982, en Gijón, batiendo al mismo adversario en el curso del mismo mes sagrado".

Hoy a las 21.00 hora argelina (20.00 GMT) en Porto Alegre (Brasil), Argelia y Alemania tienen otra cita con la historia mundialista.

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