Joan Oliver opina que "ningún club del mundo da tanta información como el Barça"

Barcelona.- El director general del FC Barcelona, Joan Oliver, ha defendido la transparencia en la gestión del club barcelonista ante los medios y sus socios, y ha subrayado que ningún club en el mundo facilita tanta información como el Barça.

"No hay ningún club de fútbol en el mundo que dé más información que el Barcelona. Esto no quiere decir que estemos en un punto óptimo, pero no tengo la impresión que no haya transparencia en la entidad", ha argumentado en una entrevista concedida a la Agencia EFE.

Oliver ha explicado que "todo el mundo que pregunta, sea socio o periodista, recibe una respuesta", aunque ha admitido: "en el detalle, no obstante, no podemos entrar".

En pocas semanas, Oliver se convertirá en el principal valedor del proceso electoral para elegir nuevo presidente, un escenario en el que ya han empezado a sumarse precandidatos y también quejas, especialmente contra Joan Laporta, quien no ha disimulado sus preferencias hacia la opción liderada por el vicepresidente Alfons Godall.

A la pregunta de si debería intervenir por la constante exposición del presidente en la precampaña, Oliver ha precisado que su función "es que la maquinaria funcione de forma transparente, con agilidad y sin errores".

Su preocupación, según ha explicado, "no está en el terreno de las declaraciones", porque "cada uno puede hacer las que quiera". En todo caso, Oliver no ve que Laporta sea un problema: "No me parece mal que exprese sus simpatías".

El director general ha subrayado la altura que ha alcanzado el Barcelona en el panorama deportivo mundial, especialmente después del exitoso año 2009, y que por ello el conjunto catalán "es la envidia de todo el mundo".

"Somos el único club que ficha sin que nos pidan avales, como ha pasado este verano con todas las operaciones", ha recordado el ejecutivo.

Por este motivo, no considera que en las próximas elecciones se vayan a presentar propuestas revolucionarias que cuestionen el modelo de la entidad.

"Me parecería lógico que no hubiese grandes inventos. La cosa funciona. Tengo la impresión de que el Barcelona lo que tiene que hacer es seguir el camino que se ha iniciado desde hace años porque es bueno. Se puede mejorar, pero sin fabricar grandes cambios", ha opinado.

Su función al frente del club ha sido motivo de grandes debates desde que ocupó la dirección general hace un largo año. En este periodo, sus intervenciones han generado igual de satisfacción dentro del club como rechazo, tanto en algún sector de la directiva como en parte del entorno barcelonista.

Oliver ha defendido que, por encima de todo, el Barça es un club transparente y ha recordado, frente a los críticos, el ejercicio que realiza el club cada vez que programa una reunión de la junta directiva o de la comisión delegada y después reúne a los medios para comunicar la toma de decisiones.

"Me lo estoy pasando bomba. Me divierto mucho y soy feliz. Hay responsabilidades en la vida que sólo las puedes asumir en función del tiempo que dura. Entiendo que el trabajo se puede acabar en cualquier momento", ha admitido.

Oliver ha sido muy gráfico a la hora de explicar su percepción de cómo funciona el club: "La organización del Barça es como un circuito eléctrico y necesita fusibles. Cuando la instalación -el club-, se calienta más de la cuenta, salta el fusible. No hay ningún trabajo divertido que sea para siempre", ha argumentado.

A pesar de las críticas que ha recibido su trabajo en algún sector del club, Oliver ha asegurado que se siente "reforzado" por el presidente y por la junta.

"Mi trabajo depende de la confianza del presidente. A día de hoy tengo plenamente la confianza del presidente y de la junta. Estoy tranquilo", ha señalado.

"No sufro con mi trabajo. Cuando sufro es en los partidos de fútbol. No existe nada en mi labor que me desborde y que me supere. Sufro sólo cuando hay cosas que nos afectan y sobre las que no tengo control y no puedo intervenir, como los partidos de fútbol", ha añadido.

Uno de los aspectos que más debate ha generado en el entorno barcelonista ha sido su sueldo, cercano al millón de euros, hecho que Oliver ha defendido por estar en correlación con los sueldos que se pagan en el fútbol.

"Hace años, el debate era la inmoralidad de los sueldos de los jugadores. Ahora ya no se habla. De la misma forma que pagamos en función de lo que pagan otros equipos en jugadores, entrenadores y secretarios técnicos, el director general cobra lo que cobran otros directores generales", ha añadido.

En todo caso Oliver ha asegurado que no se escandaliza por la polémica que se ha generado al respecto. "Hay gente que se distrae con las polémicas", ha indicado.

A este respecto, Oliver ha defendido que Pep Guardiola, al que considera el "mejor entrenador del mundo", cobre en función de esta categoría, aunque ha precisado que existen dos técnicos, como Jose Mourinho (Inter) y Fabio Capello (seleccionador de Inglaterra), "que están fuera de mercado".

"Pep debería ganar más de lo que gana de fijo. Y una parte importante de variables. Al margen de Mourinho y Capello, que están fuera de mercado, Guardiola ha demostrado que es el mejor y por lo tanto debería ser el que cobrase más después de estos dos", ha asegurado Oliver.

Finalmente, el director general ha reconocido que no es persona "de grandes ideas, porque nunca las he tenido" y que su llegada al club se produjo en un momento "difícil".

"Estaba en Nueva York y Laporta me llamó para decirme: 'Esto está fatal. Ven a ayudarnos'. La ayuda, básicamente, ha sido que la organización funcione. Es así de fácil", ha recordado.

"Al final, el impulso ha sido para que en esta casa cada uno haga su función. Procurar que los engranajes funcionen. Ahora tenemos las personas adecuadas para hacer el trabajo", ha concluido.