Carlos Rodríguez
San Sebastián, 27 ago.- La Real Sociedad empieza a ilusionar a la afición tras su victoria ante el Celta, partido que ganó con 10 jugadores forjados en Zubieta y, por primera vez, en muchos años sin ningún refuerzo europeo.
Los tres jugadores que deben aportar un plus en algunos puestos son este año el uruguayo Chory Castro, el mexicano Carlos Vela y el chileno Claudio Bravo, todos ellos americanos ya que la marcha de Vadim Demidov ha dejado a la Real sin jugadores del resto de Europa.
Lo más importante de todas formas para la afición es la presencia de jugadores hechos en casa ya que en el once inicial, salvo Vela, Alberto De la Bella y Bravo, el resto eran futbolistas de cantera.
En la segunda mitad, el entrenador de la Real, el francés Philippe Montanier, dio entrada al Chory Castro pero también a Gorka Elustondo y a Rubén Pardo, lo que demuestra que el armario canterano parece todavía no tener fondo.
El otro refuerzo llegado en calidad de cedido para esta temporada, José Ángel, no tuvo minutos aunque se supone está llamado a disputar la titularidad en la banda izquierda que de momento ocupa el catalán De la Bella.
El éxito de la cantera quedó representado en el encuentro ante el Celta por Imanol Agirretxe, autor de dos goles, más otro anulado y un poste, con lo que completó uno de sus mejores encuentros con la camiseta blanquiazul.
El objetivo del jugador de Usurbil será mejorar los 10 goles de la pasada campaña que le convirtieron en el segundo máximo realizador blanquiazul, tras Carlos Vela.
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