Ledesma, un título para Argentina que se escapó a Quesada por un punto

Si los All Blacks fueron los que impidieron que Gonzalo Quesada se convirtiera en el primer argentino en ser campeón del mundo, es otra vez Nueva Zelanda el que se cruza en el camino de un antiguo Puma, ya que serán los rivales del equipo de Ledesma en el partido definitorio del sábado en Twickenham.

A Quesada le separó un punto de ser campeón mundial, ya que Nueva Zelanda se impuso a Francia en aquella final por 8-7. Y los Bleus encerraron a los All Blacks en la parte final del partido.

A los dos, a Quesada y a Ledesma, les hubiera gustado estar en esa final con Argentina, pero lo hicieron con equipos para los que trabajan.

Ledesma, que no pudo evitar cantar el himno argentino en la semifinal en que su equipo australiano se impuso a los Pumas (29-15), está con los Wallabies por deseo del seleccionador de este país, Michael Cheika, quien le dio la primera experiencia profesional como entrenador en el Stade Français parisino.

"Cuando yo estaba ya en el Stade, veía a Ledesma como jugador en Clermont y en el Mundial de 2011. Lo quería traer a él y a Gonzalo Quesada, pero ambos estaban haciendo algo, Quesada con Francia, como entrenador de pateadores, y Ledesma como jugador. Me gustaba la combinación de ambos juntos, ya que tienen diferentes cualidades", explicó Cheika.

Ledesma y Quesada fueron dos de los jugadores que ganaron la medalla de bronce con Argentina en el Mundial de 2007.

Quesada, de 41 años, tras una rica carrera como apertura en Hindú y en varios clubes franceses, empezó como entrenador de pateadores con la selección francesa, entre 2008 y 2011 antes de ser técnico de Racing Metro 92. En la actualidad es director deportivo del Stade Français.

"No es mi himno ni mi camiseta. Podría sentir el mismo placer, pero agregando más emoción si fuera entrenador de Argentina", dijo Quesada cuando era técnico de pateadores de Francia.

Ledesma tiene el mismo compromiso que Quesada y también le gustaría un día estar en el equipo de los Pumas.

"Recuerdo cuando fuimos a Mendoza este año a jugar el Rugby Championship y estábamos subiendo las escaleras antes del partido. Le pregunté: ¿vas a cantar tu himno, el himno argentino?' Y él no estaba seguro de poder hacerlo, por lo que le dije, por supuesto, es tu herencia. Me encanta que lo haga", dijo el técnico australiano, Michael Cheika, antes de la semifinal contra Argentina.

"Mario tiene el conocimiento, la técnica, la filosofía y la dedicación para ir hasta el final. Es alguien que es muy efectivo en su trabajo. Pasa tiempo reflejando lo que quiere hacer. No llega simplemente y dice: chicos, hagan esto", añadió Cheika.

"Y es que los australianos no son tan diferentes de los argentinos. Creo que es muy importante comprender cuando alguien conecta con el equipo. Los jugadores ven que no está por el dinero sino para sacar lo mejor de ellos", explica.

Ledesma, durante la primera fase, reconoció que se siente completamente integrado en la selección australiana.

"Desde que empecé con Australia, me sentí parte del equipo. Uno trata de transmitir lo que es uno, más que lo que sabe uno. Pasa por ahí. Teniendo tan buenos jugadores con tanta experiencia, hay que apelar a valores más humanos que técnicos", explicó.

"Estoy disfrutando un montón. Cuando sos jugador, uno está metido en hacer frente partido a partido. Tienes mucha presión y te olvidas de disfrutar. Estás como en una burbuja. Como entrenador tienes mas en cuenta el contexto, cómo está viviendo el equipo. Hay un montón de parámetros, que uno no maneja como jugador y que como entrenador tienes que estar más atento", indicó Ledesma.

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