Jonkoping (Suecia).- Las selecciones de Dinamarca, Francia y España dieron un paso de gigante para alcanzar las semifinales del Mundial, tras imponerse a Polonia, Hungría y Noruega, respectivamente, en una primera jornada de la segunda fase marcada por la excelente actuación de los porteros.
Los guardametas fueron piezas clave en los triunfos de España y, sobre todo, de Dinamarca, que logró la victoria liderada por el jovencísimo Niklas Landin Jacobsen, que neutralizó la poderosa artillería del conjunto polaco, con cañoneros de la talla de Karol Bielecki o Marcin Lijewski, con una sublime actuación.
Tal y como refleja el estratosférico sesenta y un por ciento de paradas con el que el cancerbero del Silkeborg concluyó la primera parte, que permitió a Dinamarca llegar al descanso con una renta de seis tantos (15-9)
Una losa demasiado pesada para el conjunto polaco, que, pese a que reaccionó en la segunda parte de la mano del jugador del Renovalia Ciudad Real Mariusz Jurkiewicz, autor de seis tantos, no pudo dar la vuelta a un marcador, que finalmente se decantó del lado danés por un ajustadísimo 28-27
Igualmente decisiva fue la actuación del cancerbero español José Javier Hombrados, que amargó con sus dieciocho paradas a un conjunto noruego que, tras la derrota cosechada hoy, se despide de cualquier opción matemática de pelear por las medallas.
Todo lo contrario que el equipo español, que tras su victoria (32-27) sobre Noruega sería matemáticamente semifinalista si logra vencer el próximo lunes a Islandia, que hoy cayó por 27-24 ante una Alemania que parece haber recuperado definitivamente al cañonero Holger Glandorf.
El jugador del Lemgo sostuvo con sus goles en el tramo final de la segunda parte a un conjunto alemán que por un día se olvidó de violencias innecesarias, y maniató al imaginativo equipo islandés con una férrea defensa que permite seguir vivos en el Mundial a los de Heiner Brand.
Como vivas siguen las opciones de clasificación para las semifinales del conjunto francés, máximo favorito al título, en el que hoy destacó un habitual actor secundario, el portero Douda Karaboue.
La salida del veterano portero de Toulouse, en sustitución de un desacertado Omeyer, permitió a los de Claude Onesta ajustar definitivamente una defensa que había tenido enormes dificultades para contrarrestar de inicio a Hungría, perfectamente comandada por Tamas Mocsai.
Problemas con los que se encargó de acabar Karaboue, que con sus intervenciones, más de un cincuenta por ciento de paradas, permitió despegarse definitivamente en el marcador a una Francia que acabó goleando (37-24) al cuadro magiar.
Mucho más ajustada fue la victoria de la anfitriona Suecia, que sigue aferrándose al sueño de las semifinales tras derrotar por 24-28 a Serbia, gracias al perfecto trabajo del portero Johan Sjostrand.
El guardameta del Barcelona Borges atajó la mitad de los lanzamientos del conjunto balcánico, un lastre insalvable para la selección Serbia, que con esta derrota se despide de cualquier opción de medalla.
Por el podio sí pugnará Croacia, que no dio la más mínima opción a Argentina, tras imponerse por un contundente 36-18 a una selección albiceleste que ya ha cumplido con su presencia en la segunda fase.
Ronda en la que los croatas, vigentes subcampeones mundiales y europeos, deberán ganar todos su partidos si quieren acceder a las semifinales, un objetivo en el que, como demostró hoy, parece empeñado el veterano extremo Vedran Zrnic, máximo goleador de Croacia.
Javier Villanueva.
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