Luis Enrique, un espejo en el que mirarse para Rafa Benítez después de Navidad

El fútbol es imprevisible. Hace un año el Real Madridaspiraba a ganarlo todo con Ancelotti en el banquillo practicando un fútbol excelso que le llevó a ganar 22 partidos seguidos: doce de Liga, seis en Champions, dos en Copa y dos en el Mundialito para proclamarse campeón del mundo. Por entonces el Barcelona no encontraba el camino, estaba a cuatro puntos del líder y ya había perdido el clásico del Bernabéu y ante el PSG en la Champions. Pero ante la Real Sociedad cambió todo.

A la vuelta de las vacaciones de Navidad, Messi y Luis Enrique se encararon en un entrenamiento fruto de la mala relación que arrastraban. El 4 de enero de 2015, el entrenador decidió dejar al argentino, a Neymar y a Piqué en el banquillo ante la Real Sociedad para dar un golpe de autoridad a un vestuario descontento con la labor del técnico. El resultado a corto plazo no fue el mejor porque perdieron 1-0, pero todo cambió. La situación estalló, Bartomeu prescindió de Zubizarreta y convocó elecciones. La situación se calmó, Messi reaccionó y desde entonces el equipo azulgrana encadenó 28 victorias, un empate y una sola derrota en los siguientes 30 partidos. Así hasta ganar la Liga, la Copa y la Champions.

Ahora es Rafa Benítez el que se encuentra con la Real Sociedad a la vuelta de vacaciones. La situación tiene muchas similitudes, porque el vestuario es escéptico respecto a sus métodos, está enfrentado a jugadores como Cristiano o James, el Real Madrid está a dos puntos del líder después de perder el clásico y el Barcelona vive días de gloria tras ganar el Mundial de Clubes.

Benítez se agarra al trabajo para revertir la situación, aunque la labor para recuperar la confianza de sus jugadores es más complicada que la de de Luis Enrique. Porque el Barcelona lleva años sabiendo a lo que juega, mientras que el Real Madrid ha ido dando tumbos desde Luxemburgo hasta Ancelotti pasando por Pellegrini o Mourinho. El entrenador no puede agarrarse a un estilo de juego como hizo el asturiano de la mano de Xavi, Iniesta o el propio Messi para ir creciendo. Necesita recuperar la mejor versión de Modric, compactar al equipo y lograr que Cristiano recupere la confianza de cara a gol.

El técnico madrileño se tomó unos días de descanso en Liverpool y ha exigido a sus jugadores a la vuelta con dobles sesiones de entrenamiento. El Real Madrid afronta una cuesta de enero con un calendario a priori sencillo y en el que solo debería preocuparle la siempre complicada visita a Mestalla pese a la irregular temporada. El Barcelona afronta el derbi catalán en el campo del Espanyol, recibe al Athletic y al Atlético. Los de Simeone visitarán Vigo además del Camp Nou y recibirá al Sevilla.Real MadridBarcelonaAtléticoJ17R. Sociedad (C)Betis (C)Rayo (F)J18Valencia (F)Espanyol (F)Levante (C)J19Deportivo (C)Granada (C)Celta (F)J20Sporting (C)Athletic (C)Las Palmas (F)J21Betis (F)Málaga (F)Sevilla (C)J22Espanyol (C)Atlético (C)Barcelona (F)

En estos seis partidos, Benítez no se puede permitir ni un tropiezo y además debe mejorar el fútbol del Real Madrid si quiere continuar al frente del equipo. Florentino Pérez la ha dado su apoyo, pero en los últimos días ha hablado con los jugadores y la dirección deportiva para conocer su opinión. El club también ha realizado encuestas y pocos no confían en la recuperación del equipo si no hay un cambio de entrenador.

La soledad del entrenador se hace palpable en Rafa Benítez. Llega muy pronto a Valdebebas y se va el último, estos días ha aludido a su madridismo y al himno que "dice 'Hala Madrid, y nada más'", pero esto no es suficiente. Los jugadores no están con él pese a que ha intentado varios acercamientos y su imagen comiendo solo en la Ciudad Deportiva es fiel reflejo de la situación.