El murciano Miguel Ángel López dio a España la primera medalla en los Mundiales de atletismo de Moscú al conseguir la de bronce en 20 kilómetros marcha por detrás del ruso Aleksandr Ivanov y del campeón olímpico, el chino Ding Chen.Se trata de la medalla número 37 del atletismo español en los campeonatos del mundo y la decimosexta en la especialidad de marcha.
Ivanov, de 20 años, dio a Rusia la primera medalla de oro en los Mundiales de Moscú con un tiempo de 1h20:58, seguido de Ding Chen (1h21:09), y de López (1h21:21, que se benefició de la descalificación del guatemalteco Erick Barrondo, subcampeón olímpico, en el penúltimo kilómetros cuando marchaba segundo.Efecto gaseosa de los japoneses
La carrera comenzó con dominio asiático. Fueron los japoneses Suzuki y Saito quienes se pusieron al frente de la prueba, dispuestos a imponer un ritmo que nadie pudiera seguir y que les llevara en solitario hacia el doblete. El ruso Andrey Ruzavin se sumó al ataque, junto al ucranio Ruslan Dmytrenko.
Empero, el cansancio y las advertencias de los jueces fueron pesando sobre todos ellos. Los dos europeos cayeron enseguida, ambos muy lejos de su mejor estado de forma. Mientras, los nipones, amenazados de eliminación, bajaron el ritmo justo en el momento en el que el grupo trasero empezaba a dividirse.
El ruso Ivanov, el guatemalteco Barrondo y los chinos Wang y Chen aumentaron el ritmo en busca de las medallas. Miguel Ángel López, hasta entonces muy cómodo en ese grupo de favoritos, empezó a perder distancia.Los errores condenan a Wang y a Barrondo
Con los nipones neutralizados, la carrera parecía que empezaba a serenarse, pero entonces llegó el cansancio y, con él, los errores técnicos y las eliminaciones. El primero en recibir la tarjeta roja fue el chino Wang. La vio en el kilómetro 16, cuando acababa de coger la cabeza de carrera.
El oro era cosa de tres: Ivanov, Barrondo y Chen. Veinte segundos por detrás, Miguel Ángel empezaba a recuperar sensaciones y a venirse arriba. Su cuarto puesto suponía mejorar su quinto de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
La sorpresa llegó con la eliminación de Barrondo. El centroamericano recibió tres cartones amarillos en cuatro kilómetros y acabó también eliminado. Chen, que empezaba a desfondarse, lo celebró en un gesto poco deportivo ya que se aseguraba la plata. Por detrás, Miguel Ángel se ponía en posición de podio.
Ivanov voló en los últimos dos mil metros, aupado por el apoyo de los miles de rusos que aplaudieron a lo largo del recorrido. El ruso se proclamó campeón del mundo en casa, en medio de una gran ovación del estadio. Poco después llegó Chen y, a continuación, el español. Miguel Ángel logra así el mejor resultado de su vida e inaugura el medallero español en estos campeonatos del mundo.
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