Nagy: "Tengo contrato hasta 2013; ahora son los clubes lo que deben hablar"

  • El internacional húngaro Laszlo Nagy, capitán del Barcelona, ha podido disputar hoy frente al Torrevieja su último encuentro con la camiseta azulgrana tras doce temporadas, aunque se ha limitado a responder: "Ya veremos. Tengo contrato hasta el 2013 y ya veremos qué pasa en el futuro. Ahora tenemos que hablar; es cuestión de los dos clubes y yo no entro en eso".

Barcelona, 2 jun.- El internacional húngaro Laszlo Nagy, capitán del Barcelona, ha podido disputar hoy frente al Torrevieja su último encuentro con la camiseta azulgrana tras doce temporadas, aunque se ha limitado a responder: "Ya veremos. Tengo contrato hasta el 2013 y ya veremos qué pasa en el futuro. Ahora tenemos que hablar; es cuestión de los dos clubes y yo no entro en eso".

"En estos momentos no hay nada claro, hay que hablar y no he puesto una fecha limite para tomar una decisión; eso sólo depende de los clubes", ha añadido.

No se quiso pronunciar al respecto a una posible renuncia a su aceptación de la nacionalidad española. "Ahora sólo toca hablar del Barça y del título que hemos logrado hoy", insistió el jugador húngaro.

Desde que comunicó a sus compañeros, a su entrenador y al club su fichaje con el MKB Veszprém húngaro el pasado 28 de abril, al final del encuentro de Liga de Campeones con el Copenhague, que término con victoria del Barcelona por 36-33, insuficiente por el 29.23 de la ida y que representaba la eliminación de la competición europea, no ha había ninguna declaración al respecto.

Lo más sorprendente de todo ha sido su posible incorporación a la selección española para los Juegos Olímpicos de Londres del próximo verano.

El día anterior a su decisión, el viernes 27 de abril, el Consejo de Ministros le otorgó la nacionalidad española, que debía refrendar jurando la constitución en el plazo de un mes. El 28 de mayo se había cumplido el plazo y Nagy, de 31 años, no había cumplido este trámite, con lo que renunciaba explicitamente a la misma.

Con contrato en vigor hasta Junio de 2013, con una cláusula de rescisión con el Barcelona de tres millones de euros, ahora llegará el momento de las negociaciones.

El secretario técnico de la sección de balonmano azulgrana, Enric Masip, ya dejó claro: "Nuestro presidente Sandro Rosell no quiere jugadores en la entidad que no estén involucrados en el proyecto". Esto quiere decir que se llegará a un acuerdo para liberar esa cláusula, aunque también lo es que el Barcelona no bajará del millón de euros si Nagy quiere irse.

En caso contrario deberá cumplir el contrato e irse en junio de 2013 con la carta de libertad bajo el brazo, algo que hoy por hoy parece impensable.

El Barcelona Intersport llegó a ofrecerle a Nagy el aumento de un veinte por ciento de su actual salario, que pasaría a ser de unos 400.000 euros por temporada, además de un contrato vitalicio similar al que en su día selló el jugador de baloncesto Juan Carlos Navarro, para entrar en el organigrama técnico del club una vez finalizada su carrera como jugador.

Pero la oferta del Veszprén -3 millones de euros por cuatro temporadas, a razón de 750.000 euros anuales- convierte a Nagy en el jugador de balonmano mejor pagado del mundo.

La otra consecuencia de la marcha de Laszlo Nagy del balonmano español es que su tan anunciada incorporación a la selección española de balonmano de cara a los Juegos Olímpicos de Londres 2012, que ya se daba por hecha, puede convertirse en la incorporación a la selección de Hungría para Londres 2012, después de tres años de ausencia en la misma, de la que era capitán.

La nueva directiva de la Federación Húngara y el anuncio de su seleccionador nacional, Lajos Mocsai, de que cuenta con él para Londres, donde Hungría será rival directo de España, aún enturbia más la situación del jugador en España.

Conviene recordar que tanto la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM), de la que partió la iniciativa de la nacionalización de Laszlo Nagy, como el Consejo Superior de Deportes (CSD) han empleado todos sus medios para que la administración de justicia española le diera la nacionalización, por vía de urgencia, que se emplea con los deportista de elite extranjeros.

El caso anterior por esta vía en el balonmano fue la nacionalización de Shiarhei Rutenka, en la etapa de López Ricondo en la RFEBM, el cuál nunca jugó con España y del meta serbio Arpad Sterbik, hoy pieza clave en la portería de la selección española.

Mostrar comentarios