¿Quiénes serán los rivales de Contador en el Tour?

Poco más de un mes de descanso ha tenido Alberto Contador para preparar el Tour de Francia. Tiempo para desconectar y recargar su musculatura privilegiada para afrontar el dificilísimo reto de alzarse con el doblete Giro - Tour. Ha examinado a conciencia los tramos más importantes de la carrera y sólo le queda descubrir cómo responderán los otros capos del pelotón.

El primero de ellos, Andy Schleck. Paradójicamente, el luxemburgués ha competido más días que el español -45 y 43 días respectivamente-, pero sus prestaciones en este inicio de temporada han sido muy distintas. Mientras el corredor del Leopard – Trek sólo se implicó realmente en las clásicas de las Ardenas, Contador mantiene su filosofía de salir a ganar todas las carreras que disputa. Andy se probó hace dos semanas en el Tour de Suiza y llegará en plenitud de fuerzas al Tour. Año tras año ha ido emparejando sus dotes de escalador con los del ciclista pinteño. Si la suerte acompaña a su hermano Frank–abandonó el Tour de 2010 por una fractura de clavícula- podrán jugar su superioridad numérica para ahogar al resto de rivales. Aunque no siempre interpretan las situaciones de carrera de forma correcta.

Por debajo de los hermanos luxemburgueses, aparece un amplio grupo de corredores que han preparado a conciencia La Grande Boucle. El RadioShack, exequipo de Lance Armstrong, tiene en Levy Leipheimer y Andreas Klöden un dúo experimentado -37 y 36 años cada uno- que, si bien no alcanzan a subir al nivel de Contador y los hermanos Schleck, meten miedo de cara a la contrarreloj final. También tendrá sus opciones Chris Horner, de 39 años, que tiene difícil confirmar en la carretera lo que expresó el pasado mes de mayo.

Los ciclistas anglosajones son legión entre los favoritos. El británico Bradley Wiggins y el australiano Cadel Evans llegarán frescos a la salida del sábado en el Passage de Gois después de variar notablemente su preparación con respecto al año 2010. Ambos disputaron el Giro de Italia y llegaron "atufados" a julio. Este año, en cambio, han preferido probarse en el Tour de Romandía y el Dauphiné. Para el combativo australiano la primera, para el camaleónico y espigado inglés la carrera antesala del Tour. Wiggins llega pletórico y parece que ha alcanzado su pico de forma demasiado pronto, lo que puede pagar en la dura tercera semana de la ronda gala.

El reto de Contador reside en salir victorioso donde otros no lo han logrado. Ivan Basso ganó el Giro el año pasado pero después sucumbió al calor del mes de julio. Ningún italiano ha pisado el podio del Tour desde que el varesino hiciera segundo en 2005. La preparación de Basso se vio lastrada por una caída entrenando en el Monte Etna en mayo. Además, su discreta actuación en el Criterium del Dauphiné convierten su estado de forma en una incógnita. En cambio, Damiano Cunego mostró su mejor versión en las rampas del Tour de Suiza para luego perder el triunfo final en la última contrarreloj. Sin embargo, la suerte le abandona en Francia. Un sinfín de "pájaras", caídas y abandonos ensombrecen sus intentos por brillar en el Tour.

La ristra de favoritos la completan Samuel Sánchez, Jurgen Van den Broeck y Robert Gesink. El campeón olímpico quiere subir un peldaño más y conseguir al fin un ansiado podio en el Tour. Desde la Vuelta al País Vasco no se ha vuelto a ver la mejor versión del ciclista del Euskaltel. En cuanto al belga, cada verano va a más y siempre se muestra combativo y ambicioso. De Gesink se espera que confirme por qué es la gran esperanza holandesa para las rondas por etapas. Su progreso contra el reloj es notable y si tiene el día puede muy pocos estarán a su nivel.

Con Contador teóricamente más desgastado, con Andy Schleck a punto y con el resto de favoritos en un estado de forma muy similar, cualquier pequeño detalle, comer a tiempo, saber medir las fuerzas, leer la carrera, conocer el estado de los rivales, puede decantar la balanza a favor de cualquiera. París espera al ganador del Tour 2011.