Quique: "No queremos que nos tomen como un equipo que sale a cumplir el expediente"

Majadahonda (Madrid).- Quique Sánchez Flores, entrenador del Atlético de Madrid, afirmó que le preocupa que no haya el "mismo baremo para un lado que para otro" por parte de los árbitros hacia los rojiblancos en el tramo final de la Liga y no quiere que se tome a su conjunto "como un equipo que sale a cumplir el expediente".

Aunque el Atlético no se juega nada en las tres últimas jornadas de esa competición, el técnico no quiere que eso influya a la hora de tomar determinadas decisiones por parte de los colegiados. "Lo que más me preocupa es que salgamos al campo y que no haya el mismo baremo para un lado que para el otro", avisó.

"Nosotros no tenemos nada en contra absolutamente (de los árbitros) y hemos ayudado a los árbitros durante todo el año, pero queremos que entiendan que lo que pase en nuestro área es tan importante como lo que pase en el área del Valladolid. No queremos que nos vean facilones en ese sentido", continuó.

"Queremos rendir y correr y que el rendimiento sea eficaz con un buen resultado. Y no queremos entregar nada ni que nos tomen como un equipo que sale ahí a cumplir un expediente. No salimos a cumplir el expediente, sino a cumplir con la profesión, que es mucho más importante", recalcó.

A la espera de las finales de la Liga Europa y de la Copa del Rey de los próximos 12 y 19 de mayo, respectivamente, el Atlético recibe al Valladolid. "Mañana va a haber un buen número de atléticos en el campo, porque es un buen día para que la afición y los jugadores se encuentren en ese último encuentro antes de la final", valoró.

"Yo entiendo que sí que realmente lo muy importante está dentro de diez días. Ahora bien, mañana nosotros queremos tener un buen rendimiento, dar la sensación de mucha profesionalidad, como el domingo pasado, y de que a nosotros nos interesa el resultado porque queremos sumar puntos", dijo Quique, que hará cambios en el once.

"Tampoco hay mucho misterio" en sus variaciones en la alineación, según explicó. "Si tenemos trece o catorce jugadores que han sido los que juegan más minutos y descansaron cinco en Sevilla, pues a lo mejor mañana la cifra ronda por lo mismo. El estímulo es hacerlo bien sin perder jugadores para los partidos más definitivos".

Quique, que advirtió de que estos partidos de Liga sin nada en juego "no es mucho momento para pruebas", porque están a "quince días de todo", resaltó que el Valladolid de Javier Clemente es un equipo "muy agresivo, que tiene un buen número de puntos respecto a los últimos partidos y que va a ser dificilísimo, porque se sienten más fuertes que antes y además se están jugando muchísimo".

"Tenemos que jugar con mucha intensidad, porque, sino, en los duelos podemos tener problemas y lo que no queremos, que son golpes y gente lesionada", añadió el entrenador, que hasta el jueves no verá ningún informe del Fulham, su rival en la final de la Liga Europa, porque le tiene "mucho respeto" al partido de mañana.

Aun así, elogió al técnico del conjunto británico, Roy Hodgson: "Hay que tener mucho respeto por este entrenador, ha hecho muy buenas temporadas, tiene mucho prestigio en Inglaterra y pasó por la liga italiana, donde guardan muy buen recuerdo de su paso por el Inter. Yo siempre sospecho mucho de esos equipos que aparentemente no tienen grandes jugadores, pero hacen las cosas muy bien".

Esa final centra la atención del Atlético. Hoy, en el Vicente Calderón, había larguísimas colas para sacar entradas para ese encuentro ante el Fulham. "Yo no quiero que se controle ninguna euforia. Nosotros, los que tienen que jugar y estar un poco fuera, sí que tenemos que tener un poco más de control de la situación, pero fuera no quiero que se controle nada", declaró.

"Al contrario, quiero que estén muy felices y muy ilusionados y nosotros, los jugadores y el entrenador, tomar conciencia de las pasiones que este equipo puede levantar y lo que estamos defendiendo. Si ayer hubo gente que durmió, y con la rasca que ha caído, cerca del Calderón, lo que tenemos que estar es superagradecidos de que esta gente hasta el ultimo momento va a estar sufriendo por nosotros. Mucha estimulación y mucho ánimo para que nosotros podamos cumplir con las expectativas", valoró.

Además, Quique descartó que su plantilla tenga ansiedad por esa final. "En absoluto. Ojalá tuviéramos una final todos los días. Estos son los momentos donde como entrenador hay que disfrutar, porque los jugadores están en un estado de ánimo brutal, muy ilusionados, alegres constantemente, no hay que pedirles prácticamente nada y eso es una gozada. Vamos a intentar vivirlo con mucha intensidad y mucha emoción, la misma que están viviendo los aficionados y que nos transmiten", concluyó.