Gijón, 19 jun.- El Sporting ya está cerrando los primeros partidos de pretemporada y aunque no están fijadas todas las fechas sí hay acuerdos para la disputa de cuatro de los encuentros que el nuevo entrenador, Manolo Sánchez Murias, quiere jugar antes del comienzo de la liga, que serán frente a Rácing, Logroñés, Universidad de Oviedo y Marino.
El club rojiblanco vuelve a los entrenamientos el próximo día 9 de julio para afrontar seis semanas de pretemporada antes de la primera jornada liguera en las que Manolo quiere disputar alrededor de una decena amistosos para acoplar la plantilla a sus planteamientos.
El Sporting jugará en este tiempo contra el Logroñés, Marino de Luanco, Universidad de Oviedo y Rácing de Santander, además de participar en el trofeo de Luarca para el que por el momento no hay un rival decidido.
El partido ante el Universidad de Oviedo había quedado pendiente a final de la temporada, enmarcado en los actos del 50 aniversario de la fundación del club universitario mientras que el encuentro ante el Rácing será en homenaje al recientemente fallecido Manolo Preciado.
Quedan pendientes otros cuatro o cinco encuentros más, que según los planes de Manolo deberían ser contra rivales cada vez de mayor entidad para llegar al comienzo de temporada ya con un buen nivel de exigencia porque el técnico quiere empezar en las posiciones de arriba desde el primer momento.
La secretaria técnica sigue sin concretar ni fichajes ni salidas aunque mantiene abiertas varias negociaciones en ambos sentidos y es posible que a lo largo de la semana puedan producirse ya las primeras incorporaciones en especial la del centrocampista Mandi que acaba contrato en el Castilla.
En el capítulo de marchas Barral interesa al Orduspor y Eguren está en la agenda de varios equipos de México y Chile pero por el momento en el Sporting se asegura que no han recibido oferta alguna por ninguna de ellos ni tampoco por Óscar Trejo por el que está interesado el Betis pero al que los rojiblancos no quieren dejar marchar ya que le consideran como una pieza clave en el esquema de la próxima temporada.
Más complicado parece que se pueda llevar a cabo el deseo del club gijonés de lograr la marcha de jugadores que no entran en los planes del cuerpo técnico como Damián Suárez, Ayoze, Luis Morán o Ricardo, todos ello con contrato pero a los que se le daría facilidades para su desvinculación.
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