El día del juicio a Benítez en el Bernabéu, el día en el que el Madrid estaba obligado a ganar y a convencer, solo hizo lo primero. La Real Sociedad se vio mermada por dos penaltis señalados equivocadamente a favor del Real Madrid. Ronaldo aprovechó el segundo y puso el 1-0 en un ambiente crispado.
Los 'txuri-urdín' reclamaron un penalti dudoso a Jonathas, y Bruma hizo justicia a su buen hacer en la segunda mitad con un golazo al más puro estilo Arjen Robben.
Cuando el Madrid estaba a merced de la Real, Ronaldo engatilló un balón complicado en un córner y salvó la papeleta de Benítez. La Real pudo empatar por medio de Pardo, pero Lucas Vázquez sentenció en un contragolpe.
Benítez respira, al menos de momento porque el Bernabéu no paró de pitar a su equipo.De penalti en penalti
El Real Madrid salió desconectado y lo pagó caro. Los futbolistas de Benítez se vieron superados por la presión de la Real Sociedad y por el espíritu de pelea de un Jonathas que fue un incordio para la defensa.
Los blancos, partidos, vivieron de las contras y de la fe de Benzema. En una de ellas, el cuero fue de lado a lado y dejó a Ronaldo solo frente a Rulli, pero inexplicablemente el portugués erró.
El Madrid creó también peligro en los córners, pero fue el colegiado el que les proporcionó su mejor ocasión. En el minuto 21, Benzema sintió el contacto de uno de los defensores de la Real Sociedad y se fue al suelo. González González no lo dudó e indicó penalti. Penalti mal señalado, penalti errado. Ronaldo hizo bueno el dicho y envió el balón a las nubes.
Instantes más tarde, Jonathas le hizo el lío a Pepe y el luso lo derribó. La jugada es muy dudosa pero no hay duda de que hubo contacto, aunque el árbitro esta vez dijo "sigan, sigan".
Tras un buen tiro de Benzema que depejó con problemas Rulli, otra pena máxima controvertida. Bale centró y la pelota dio en Yuri, primero en su pierna y segundo en su mano de manera involuntaria, y de nuevo al punto fatídico.
Esta vez Ronaldo no falló y puso el 1-0 en el marcador. Los jugadores de la Real Sociedad se comían al árbitro y así se llegó al descanso.Ronaldo y la casta salvan a Benítez
Con la torrija volvió a salir el Madrid y Bruma lo aprovechó. El hombre que sustituyó al lesionado Canales recibió la pelota en el ángulo izquierdo, y con la rosca propia de los lanzamientos de Arjen Robben colocó la pelota en la escuadra haciendo imposible la estirada de Navas.
Pitada mayúscula en el Benabéu, que vio como Benítez reculaba dando entrada a Kovacic por james. El cambio, lejos de mejorar el juego de los madridistas, lo empeoró.
Un Madrid sin rumbo estaba a mercerd del conjunto vasco. Solo un milagro podría salvar la papeleta, y sucedió. A la salida de un córner, Ronaldo empaló la pelota con su pierna izquierda con un bello escorzo y puso el 2-1 en el electrónico. Un gol de aliviomomentáneo.
A partir de ahí el conjunto blanco se durmió y el Bernabéu volvió a entonar la ya clásica sinfonía de pitos en las últimas fechas. Rubén Pardo pudo hacer del mal preludio una fuga pésima, pero su tiro fue despejado por Pepe cuando se iba para dentro.
En los últimos minutos de coraje y casta, Ronaldo bajó y recibir y armó un contragolpe para que Bale pusiese el 3-1 en bandeja a Lucas Vázquez.
Otra victoria extraña en el Bernabéu que no hace más que alimentar las dudas sobre el futuro de Benítez.
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