Los jugadores suspendidos, acusados de haber utilizado en 2012 el producto thymosin beta-4 (un peptida que facilita la cura de lesiones), no habían sido en un primer momento castigados en marzo pasado por la justicia interna del campeonato de fútbol australiano, llamado Australian Rules (AFL), pero la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) acudió al TAS, que se apoyó para tomar su decisión en una investigación detallada de la Agencia Antidopaje Australiana (Asada).
"Los jugadores, de los que doce forman actualmente parte del efectivo del Essendon, fueron suspendidos para la temporada 2016. El club está analizando la decisión" del TAS, explicó la presidenta del club, Lindsay Tanner, en un comunicado.
De los otros 22 jugadores suspendidos, algunos se han retirado tras estos hechos y otros cambiaron de club.
En marzo, la AFL había condenado al club Essendon a la más fuerte multa infligida en la historia de Australian Rules (2 millones de dólares australianos, 1,28 millones de euros) y suspendió doce meses al entrenador James Hird.
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