Tras 12 años, se retiró Warner, uno de los grandes de la NFL

Tempe (EEUU).- Kurt Warner, mariscal de campo de los Cardinals de Arizona, anunció su retirada de la competición activa después de jugar 12 temporadas en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), en las que ganó un título de Super Bowl jugando para los Rams de San Luis.

Warner, formado en la la Universidad de Northern Iowa, decidió poner fin a su carrera dentro de la NFL, en donde fue nombrado en dos ocasiones Jugador Más Valioso (MVP) de la Liga y una vez más cuando guió a los Cardinlas al Super Bowl XLIII, la pasada temporada.

El mariscal de campo, de 38 años, puso fin a la carrera en la liga que primero lo rechazó y en la que más tarde se convirtió en ídolo al llevar a los Rams a dos Super Bowls, ganando el primero de ellos.

Aun cuando se pensaba que su juego estaba en crisis y decadencia, volvió para llevar a los Cardinals al Super Bowl del año pasado.

Warner decidió dejar la competición cuando le quedaba todavía una temporada de un contrato por dos años y 23 millones de dólares, que firmó con la certeza de que todavía podía jugar al más alto nivel, pero ahora admitió que no es lo mismo y no quiere "engañar" a nadie y menos a el mismo.

El tackle defensivo de los Cardinals, Darnell Dockett, consideró que Warner "tuvo una carrera dominante, y es una buena persona", comentó "Va a hacer lo que es mejor para su familia. Ya jugó bastante. Nos llevó al Super Bowl el año pasado. Tuvimos una gran temporada este año".

Warner abandona la NFL con un historial que podría permitirle su ingreso al Salón de la Fama, a pesar de que empezó a ser titular a los 28 años.

El mariscal incluso se diferencia de los 14 "quarterbacks" que llegaron al Salón de la Fama en los últimos 25 años, debido a que tiene un mejor porcentaje de pases completos, de yardas por intento y por partido.

Warner sumó un total de 124 partidos de temporada regular, en los que completó 65.5 por ciento de sus envíos para 32.344 yardas y 208 touchdowns.

Junto con el legendario Fran Tarkenton, son los únicos mariscales de campo en la historia de la NFL que han logrado 100 touchdowns y 14.000 yardas con dos equipos diferentes.

También fue el jugador que llegó más rápido a 10.000 yardas por aire, y empató con Dan Marino como los más rápidos en alcanzar las 30.000.

Además, tiene los tres mejores partidos en pases en la historia del Super Bowl, con 1.156 yardas en la fase final del 2008, con los que implantó récord de los 1.063 que impuso en 1999 con los Cardinals.

Warner llegó a los Rams como suplente en 1998, y se quedó con el puesto de titular cuando al año siguiente Trent Green se lesionó y no pudo jugar.

Esa campaña los Rams tuvieron marca de 13-3 y derrotaron a los Titans de Tennessee en el Super Bowl, por lo que Warner fue elegido MVP de la liga y del Super Bowl.

Los Rams perdieron la primera ronda de la fase final de la temporada siguiente, pero Warner los llevó al Super Bowl nuevamente en 2001 cuando perdieron ante los Patriots de Nueva Inglaterra, y nuevamente fue elegido MVP.

En el inicio de la temporada del 2003 Warner sufrió una conmoción cerebral y nunca volvió a ser titular por San Luis.

Posteriormente firmó un contrato como agente libre con los Giants de Nueva York para la campaña del 2004, pero fue reemplazado por el novato Eli Manning tras nueve partidos.

Warner llegó a los Cardinals en la temporada del 2005 y alternó entre la titularidad y el banquillo antes de reemplazar a Matt Leinart a mediados de la temporada 2007 y volver a ser el mariscal estelar y ganador de sus mejores años.

El ya ex mariscal de los Cardinals también se convirtió fuera del campo en uno de los deportistas más admirados y respetados por todos ante la gran trayectoria personal y comportamiento intachable que tuvo como ciudadano.

Warner antes de llegar a ser una de las grandes estrellas de la NFL tuvo que hacer todo tipo de trabajos para compaginar su pasión por el deporte del fútbol americano e inclusive por las noches acudía a uno de los grandes almacenes de comida para recargar las estanterías de mercancías.

"Trabaje duro, muchas horas y mucho sacrificio, pero siempre confié en mis posibilidades de alcanzar los sueños de ser un buen mariscal de campo en la NFL y ese ha sido mi gran triunfo junto con todo lo que tengo al lado de mi familia", destacó Warner. "Sin ellos nunca hubiese conseguido nada, han sido mi fuerza y apoyo".