Vuelta España 2015: Mikel Landa se lleva la etapa más dura de la historia

Hace algo más de un año, la organización de la Vuelta España pidió a Joaquim Rodríguez que diseñara una etapa para una ronda española que busca ganarse el pan a base de descensos y rampas imposibles. Así, fiel a su tradición de ciclista sufridor y persistente ante la adversidad, el ciclista catalán creó de la nada una de las etapas más duras que se recuerdan en la historia reciente del ciclismo. Seis puertos (cuatro de primera y uno especial) en tan solo 138 kilómetros. Palabras mayores.

Y ante la adversidad se creció un Mikel Landa para coronarse en una etapa que entrará en los libros de historia del ciclismo español. El ciclista vasco llegó en el grupo de cabeza al último puerto, tiró de inteligencia y coherencia, y entró primero en una línea de meta donde hubo más sudor, sangre y lágrimas que nunca. Nunca más se correrá en España una etapa tan dura como esta. Por el bien de los corredores.

Porque la carrera de hoy no daba lugar a grandes excentricidades. Los ataques eran considerados una osadía con unas rampas tan monumentales y continuadas.Froome, que fue uno de los corredores que le dejó un recado a Purito en la ida, pereció a los pocos kilómetros de arrancar ycayó al suelo.Ahí acabó su Vuelta España pero él aún no lo sabía.Eso no fue una simple caída sino eso sino un mensaje: el nerviosismo de los corredores pululaba en el ambiente.General #LV2015: Fabio Aru nuevo líder, @tom_dumoulin sale de Andorra en posición favorable y @chrisfroome se hunde. pic.twitter.com/ksFiaKPg4X— Vuelta a España (@lavuelta) septiembre 2, 2015

Los encargados de enfrentarse a lo desconocido fueronImanol Erviti y Mikel Landa. El primero se partió la camisa a falta de 100 kilómetros y pereció en La Gallina y el segundo lanzó su ataque en un puerto que nunca se había subido en la historia. Honor para el primero, el segundo estaba cerca de entrar en la historia pero como, Froome, tampoco lo sabía.

Para los favoritos, todo fue por los derroteros habitualeshasta La Gallina, donde sucumbió Froome. En plena ascensión, y al son de la lluvia, el británico dijo basta y decidió culminar a su propio ritmo un puerto demasiado exigente para un ciclista que viene de bajarse del podio en París. ¿Osadía o valentía? Como se dijo con Contador en el Tour: estas actuaciones hace que los escépticos saquen a la calle la bandera del ciclismo.

Acostumbrados al frenesí cuando la montaña pica hacia arriba, el espectador debe acostumbrase con más asiduidad a ver como se incrementan las distancias en los descensos. Eso ocurrió en La Gallina. Ahí,Purito Rodríguez y Alejandro Valverde vieron su oportunidad para fracturar la carrera. Ambos apartaron a Dumoulin de la General a base de valentía pero fue humo. A pocos kilómetros de la subida al Alto d ' Encamp el holandés volvió al grupo de favoritos.El espectáculo estaba a punto de empezar.

En las primeras rampas de la última cima, Mikel Landa tiró de inteligencia y supo administrar su tiempo para coronar el primero en meta. Cosa de galones. Por detrás la pólvora estaba mojada pero hubo truenos propiciados por un Fabio Aru con las piernas frescas después de no competir en Francia.

El Tour siempre paga sus deudas. La ronda gala percutió en un Valverde, Nairo Quintana y Purito Rodríguez que sucumbieron al ataque del ciclista italiano, el nuevo líder de la Vuelta España.