Varios miles de personas se han concentrado en Washington y San Francisco, mientras que ha habido protestas de menor importancia en ciudades como Nueva York y Los Angeles, según ha informado la cadena de televisión estadounidense CNN.
Los manifestantes han expresado su descontento con las políticas pergreñadas por Trump sobre medio ambiente o derechos de la comunidad LGTBI, entre otros asuntos.
Los convocantes consideran que la victoria de Trump supone una amenaza para los derechos civiles, en particular para las minorías como musulmanes, negros o inmigrantes. Además, denuncian el carácter machista del magnate.
Las manifestaciones por ahora se han desarrollado de forma pacífica, aunque en Portland se produjeron el viernes algunos conatos de violencia con la rotura de escaparates, pintadas y daños en coches.
El viernes, el presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus --quien ha sido elegido como jefe de gabinete de la Casa Blanca--, instaba a los manifestantes a aceptar el resultado de las elecciones.
El propio Trump denunció que eran personas influidas por los medios de comunicación, pero el viernes dio marcha atrás y les lanzó incluso elogios.
"Me encanta el hecho de que haya pequeños grupos de manifestantes que anoche demostraron su pasión por nuestro gran país. Nos vamos a unir todos y estaremos orgullosos", dijo el multimillonario a través de la red social Twitter.
Ahora varias de las propiedades más emblemáticas de The Trump Organization, como la Torre Trump de Nueva York o el Hotel Internacional Trump de Washington, cuentan con la protección de las fuerzas de seguridad.
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