La CEOE rechazará cualquier subida del Impuesto de Sociedades

Reducir el déficit es prioritario. Lo exige Bruselas y es necesario para la estabilidad y la confianza en la economía de España. De Guindos ha anunciado este martes que utilizará el Impuesto de Sociedades para hacerlo y los empresarios ya han dado su opinión. Un no rotundo.

Aún falta saber cómo se va a llevar a cabo. Todo parece indicar que se trata más de una cuestión de números que de cantidades y el objetivo es llenar las arcas en 2017  aunque eso implique recaudar menos el año siguiente, ya que ha anunciado que afectará a los tipos mínimos en los pagos a cuenta del impuesto. Ahora, las empresas realizan al año tres pagos fraccionados que suponen una liquidación anual del impuesto de sociedades que se presenta en el mes de julio en el caso de que el año fiscal coincida con el natural. Los pagos fraccionados se determinan en función de la cuota resultante del año anterior o de la evolución de la base imponible de los tres, nueve u once primeros meses. Es la empresa la que opta por uno u otro método de cálculo. 

Subir el mínimo que se paga en estos plazos ya se hizo en 2012 para aumentar la recaudación y después el Estado devolvió la desviación en caso de que existiera. Es decir, que esta medida supone que las empresas adelanten el dinero de sus cuentas de resultados al Estado, es parecido a un préstamo y por eso, en sentido estricto, no es subida de impuestos. Pero si en 2018 esta medida sigue en vigor entonces sí supondrá una subida de impuestos real para las empresas. 

A falta de conocer los detalles de la medida la CEOE remite al documento con sus propuestas empresariales presentado antes de las elecciones. Allí rechazaban de plano cualquier subida de impuestos a las empresas argumentando que España es el país con mayor presión fiscal. En Europa, los ingresos del Estado por impuestos empresariales suponen de media el 25%, en España la cifra es del 32,5%.

Tocar el impuesto de Sociedades puede dañar otros aspectos de la economía. Reduce el sueldo y destruye el empleo según un informe de La Reserva Federal de Estados Unidos. Después de analizar el efecto de este impuesto en los diferentes Estados concluyeron que una subida de un punto porcentual supone una reducción media de los sueldos del 0,367% en ese condado, respecto a los condados que hacen frontera y donde el impuesto sobre las empresas se ha mantenido sin cambios. 

Sin embargo bajarlo no afecta de la misma manera al empleo salvo si se hace en una época de recesión económica. 

De todos modos el informe asegura que no puede concluir que esta media no beneficie de otro modo a la economía nacional en momentos de expansión.