La protesta campesina que se desarrolla en Colombia desde hace once días continuaba este jueves pese a que los manifestantes accedieron a reabrir temporalmente la bloqueada vía Panamericana, importante ruta de abastecimiento del suroeste del país.
Los manifestantes decidieron "realizar un gesto unilateral de apertura para facilitar la movilidad de esta vía en una duración de cinco horas, a partir del día hoy, 9 de junio de 2016, desde las 13H00 a las 18H00 (locales)", dijo en un comunicado la Cumbre Agraria, que convocó a la protesta.
"Esta apertura provisional la realizamos como un gesto humanitario frente a la sociedad colombiana y como una expresión de voluntad política para que se instale la mesa de negociación de la Cumbre Agraria", integrada por organizaciones campesinas, indígenas y afrodescendientes, detalló el texto.
El gobierno anunció el miércoles un acuerdo para la reapertura de la vía con comunidades indígenas del departamento del Cauca (oeste), donde desde el inicio de la protesta el 30 de mayo se mantenía cortado el paso en la carretera Panamericana.
El bloqueo generó según el gobierno problemas de suministro de alimentos, insumos médicos y combustible en el suroeste del país.
Como los dirigentes de la Cumbre Agraria no participaron en pleno de esa decisión, se dudaba de que fuera ejecutada.
"Hay distintos actores y distintos voceros de esta protesta social y ha sido muy difícil mantener los acuerdos a los que se ha llegado", dijo a la emisora Blu Radio el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, que ha participado estos días en reuniones con los manifestantes.
Hasta ahora, el diálogo se veía complicado por las exigencias que ponía cada parte para sentarse a negociar: el gobierno pedía primero el desbloqueo humanitario de la carretera Panamericana y los manifestantes decían que para ello tenían que tener antes garantías de que no serían "reprimidos".
En el comunicado en que anunciaba la reapertura de la vía, la Cumbre Agraria pidió que la mesa de negociación con el gobierno se instale en el pueblo de Quinamayó, en Cauca, habitado por comunidades afrodescendientes, y exigió "respeto" a los manifestantes.
Tras sobrevolar la carretera Panamericana, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, dijo que su reapertura temporal "no contribuye para nada a la normalidad", porque la vía "está llena de obstáculos" como piedras, palos y aceite, que según dijo tomará al menos un día limpiar para que sea seguro transitarla.
Los campesinos se manifiestan contra el aumento de las importaciones de alimentos, que atribuyen a los tratados de libre comercio con Estados Unidos y Europa. También alegan altos índices de pobreza rural, amenazas de grupos armados irregulares y falta de tierras propias para cultivar.
Además, aseguran que el gobierno ha incumplido acuerdos agrícolas alcanzados tras dos paros de fuerte impacto en 2013 y 2014.
A la protesta campesina se sumó esta semana un paro de camioneros, que piden, entre otras cosas, mejores fletes, la puesta en marcha efectiva de un fondo para la renovación de vehículos, programas sociales para los conductores y seguridad en las vías.
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