La compañía catalana Scutum, dedicada al diseño y fabricación de motos eléctricas, prevé inaugurar en marzo una planta en Molins de Rei (Barcelona), con la que tendrá capacidad para producir 10.000 unidades al año.
El consejero delegado de Scutum, Carlos Sotelo, ha explicado en una entrevista de Europa Press que la compañía ha invertido un millón de euros en la nueva factoría, que tendrá dos líneas de producción, una para el montaje del vehículo y otra para la integración de la batería.
Las actuales instalaciones, ubicadas en Esplugues de Llobregat (Barcelona), se mantendrán como sede de la compañía y también se ubicará allí el departamento de diseño para futuros modelos.
Con la inauguración de la nueva planta, Scutum también lanzará en España su nueva denominación comercial, con la marca Silence, que ya la utiliza para sus motos en el extranjero.
Sotelo impulsó Scutum en 2011 con el objetivo de mejorar la calidad de vida en las ciudades reduciendo la contaminación, y recibió el aval de Repsol, Caixa Capital Risc y el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) del Ministerio de Industria, que son socios de la compañía desde 2014.
CRECIMIENTO
La compañía vendió el año pasado alrededor de 500 motos, de las que 316 se matricularon en España y el resto en otros países europeos, principalmente en Italia y Gran Bretaña; todas son del modelo S02, destinado al reparto de mercancías, con clientes como Correos, Ara Vinc y Amazon, entre otros.
Durante este año, prevé impulsar su expansión internacional con este modelo, con lo que alcanzará una producción de entre 1.500 y 2.000 unidades, y a finales de año lanzará un nuevo modelo, el S01, disponible para el uso de particulares y con la característica que llevará una batería extraíble que se podrá cargar en cualquier enchufe.
La presentación oficial de la Scutum S01 será en noviembre en el Salón Eicma de Milán, el más importante del sector de las dos ruedas, y se empezará a producir en serie a principios de 2018.
EXPORTACIONES
En la actualidad, casi el 70% de la producción de Scutum se vende en España, y el objetivo es que en los próximos cinco años este porcentaje se reduzca a un 20%, mientras que las exportaciones alcancen un peso del 80%, básicamente en Europa, con el foco puesto en Italia, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Bélgica y Holanda.
"La intención de los socios de Scutum es conseguir un proyecto industrial líder en Europa", ha asegurado Sotelo.
La compañía cerró el ejercicio 2016 con una facturación de 2,2 millones de euros, frente a los 500.000 euros registrados en 2015, y para este año estima que la cifra de negocios se duplicará, hasta alcanzar alrededor de cinco millones.
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