El fabricante alemán de automóviles Volkswagen retirará unos 50.000 vehículos en China a causa de problemas en los frenos, según han informado las autoridades chinas que se encargan de los controles de calidad. A la multinacional alemana le llueven los problemas tras el diéselgate. Ahora ha decidido retirar del país 50.000 modelos 'Beetle' vendidos entre el 1 de junio del año 2012 y el 6 de agosto de 20158.
A los conocidos como escarabajos se unen los modelos Volkswagen Golf Variant, vendidos entre el 1 de julio de 2012 y el 6 de julio de 2013. Así lo informa un comunicado publicado el pasado viernes en la web oficial del organismo regulador chino de calidad ASDIQ.
La compañía resolverá los problemas en estos modelos de forma gratuita. El problema consiste en una pieza defectuosa que puede hacer que los frenos no funcionen correctamente si está conectado el control de velocidad del coche.
La llamada a revisión para la sustitución de la pieza comenzará el próximo 6 de febrero. Y mientras tanto, se recomienda a los conductores que no activen el control de velocidad.
La producción de Volkswagen ha sido mirada con lupa desde el año 2015, cuando se supo que había instalado un software en 11 millones de automóviles que estaba destinado a superar las pruebas de control de emisiones de gases contaminantes.
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