Sao Paulo, 31 oct.- Las acciones de la petrolera brasileña OGX perdían un 30 % a media jornada de hoy en la bolsa de Sao Paulo luego de que la empresa anunciara la víspera que se había acogido a la ley de quiebras para iniciar un proceso de concurso de acreedores.
Los negocios con los papeles de la petrolera controlada por el multimillonario Eike Batista fueron suspendidos temporalmente desde la apertura hasta la divulgación del comunicado en que la empresa confirmó que había solicitado su Recuperación Judicial, como se conoce en Brasil a la ley de quiebras.
Una vez volvieron a ser negociadas, la cotización de las acciones ordinarias de OGX cayó a 0,13 reales (unos 0,06 dólares) y esa tendencia se mantuvo a lo largo de la mañana, con lo que a media jornada perdían un 30 %, hasta los 0,12 reales (0,05 dólares).
Las acciones venían depreciándose desde el martes, cuando la petrolera admitió el fracaso en las negociaciones que adelantaba desde hacía varios meses con los propietarios de los bonos emitidos en el exterior por 3.600 millones de dólares.
El valor de los títulos ordinarios cayó un 20,69 % el martes y un 26,09 % el miércoles, cuando la empresa anunció después del cierre del mercado su opción por negociar con sus acreedores con la mediación de la justicia.
La legislación brasileña prevé la suspensión de las negociaciones de las acciones de una empresa que se acoge a la ley de quiebras pero no establece un plazo fijo para esta paralización.
La dirección de la bolsa de Sao Paulo anunció que los papeles podían ser negociados desde este mismo miércoles pero los excluyó del Ibovespa, el principal indicador del mercado bursátil brasileño, así como de los demás indicadores del parqué.
Al final de la jornada de este jueves, la dirección de la bolsa paulista realizará un procedimiento para definir el valor de retirada de las acciones de OGX de los diferentes índices de acciones.
Ese valor será usado para ajustar los índices, que a partir del viernes no tendrán en cuenta el valor de la petrolera.
La OGX, empresa bandera del grupo controlado por Eike Batista, decidió acogerse a la ley de protección por quiebras debido a sus graves problemas financieros.
El procedimiento le permite seguir operando mientras negocia con sus acreedores con la mediación de la justicia.
Además de los 3.600 millones de dólares del valor de los bonos colocados en el exterior, la empresa tiene deudas por otros 1.500 millones de dólares con bancos y abastecedores.
La petrolera fue creada en 2007 cuando Batista, el entonces séptimo hombre más rico del mundo, se adjudicó derechos para explorar 21 áreas petroleras en Brasil.
La empresa abrió su capital en junio de 2008 en una operación que le permitió recaudar 6.700 millones de reales (unos 3.045 millones de dólares) para financiar sus planes de extracción de petróleo en el Atlántico.
Los problemas financieros surgieron el año pasado, cuando la compañía admitió que la producción de varios de los pozos que ya tiene en operación es muy inferior a la anunciada inicialmente.
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