Así es el pensionista español del futuro: conformista, vago y poco enterado

  • La foto del futuro pensionista español podría ser más fea, pero es casi imposible. Empieza a ahorrar tarde y poco, no quiere trabajar más para mejorar su calidad de vida tras el retiro y no se enfada cuando le suben los impuestos si pagar más supone garantizar su pensión.
El gasto en pensiones aumentó el 5 por ciento en noviembre hasta los 6.845 millones
El gasto en pensiones aumentó el 5 por ciento en noviembre hasta los 6.845 millones
E.Utrera

España es el paraíso de quienes buscan buenas playas, suculentos platos de paella y marisco y el mejor ambiente nocturno. Pero, del quinto estudio internacional sobre jubilación realizado por la francesa AXA se deduce que nos falta mucho para ser un destino atractivo para los gestores de pensiones,, que velan porque lleguemos de la mejor manera posible al momento del retiro.

De los resultados que comparan 26 países se desprende que somos un tanto 'vaguetes' incluso en tiempos de crisis como los que nos azotan –muy finamente, pero sin dejar lugar a las dudas, AXA dice de los españoles que rechazan "de plano" trabajar más años para garantizar sus ingresos-, poco enterados –"la mayoría no está preparada"- y, para rematar la faena, conformistas.

Porque lo peor del caso es que tanta dejación no es sinónimo de confianza. Todo lo contrario: resulta que el 51% de los españoles sospechamos que nuestra pensión –la media es de 889,35 euros segun el Ministerio de Trabajo- no nos llegará para vivir. ¿Masoquistas o tontos? Según se mire.

El estudio deja algunas perlas que, aparentemente, podrían dar la impresión de que somos el país más despreocupado de Europa en lo que a pensiones se refiere. Éstas son las más impactantes:

-De elevar la edad de jubilación, nada. El 74% de los españoles nos negamos a trabajar más años. Hasta ahí nada raro, porque aumentar la edad de jubilación es la opción peor valorada en la media de los 26 países analizados. Pero por lo visto, nos aterroriza mucho más que al resto pensar en estar dos años más al pie del cañón: el rechazo supera en 20 puntos la media europea.

Algún consuelo nos queda. Según el informe, los habitantes de la primera economía de Europa, Alemania, tampoco encuentran un placer especial en largar su vida laboral. Un 71% no quiere ni oír hablar de la propuesta.

Claro que, no se hagan ilusiones, no sólo son más ricos; también empiezan a preparar su jubilación cuatro años antes que los españoles. Sólo los filipinos, los británicos, los marroquíes y los singapurenses son más previsores que los teutones. Curiosamente, salvo nuestros vecinos del sur, ninguno de ellos muestra una especial resistencia a que le amplíen la edad de jubilación.

-Pagamos con alegría más impuestos. Conclusión sorprendente y difícil de explicar. Máxime si tenemos en cuenta que del informe se desprende que el 57% de los españoles creemos que los ingresos que tendremos después de jubilarnos no serán suficientes.

Sin embargo, que pongamos gustosamente en manos de Hacienda un porcentaje aún mayor de nuestros ingresos tiene una explicación: Sólo Francia entre los países más avanzados de Europa depende tanto –un 93%- como España –el 89%- de la pensión del Estado después de terminada la vida laboral.

Únicamente los antiguos países del Este, Polonia, Eslovaquia y Hungría, alcanzan esos porcentajes.Bajo el paraguas de papá Estado, no es extraño que sólo el 5% de los españoles aseguren que su principal fuente de ingresos en la jubilación procederá de los planes de pensiones. Es el porcentaje más bajo junto al vecino galo y Luxemburgo.

-Nos preparamos tarde y mal. Si en una hipótesis de lo más indeseable el Estado tuviera problemas en el futuro para pagar las pensiones, a los españoles el problema nos va a coger mirando hacia otro lado. Según el informe, la solución preferida es, como ya se ha dicho, aumentar los impuestos.

Porque la alternativa de ahorrar provoca urticaria. Sólo un 45% de la población tiene como opción favorita la de guardar para mañana. En cuestiones de ahorro tenemos los ojos rasgados: sólo los chinos, con un 31%, dicen que van a ahorrar menos. Y también los luxemburgueses –con un 22%- pero como todo el mundo sabe, éstos tiene el riñón forrado ya desde la cuna.

Mostrar comentarios