Bruselas, 15 ago.- La Comisión Europea celebró hoy la decisión de un panel de disputas de la Organización Mundial del Comercio, que ha confirmado que el régimen de impuestos de Filipinas sobre aguardientes importados desde la UE y EEUU es discriminatorio.
"El informe del panel es la confirmación de lo que es un claro caso de discriminación de impuestos que ha sido y aún es un importante obstáculo a las importaciones a Filipinas", indicó el portavoz comunitario de Comercio, John Clancy, en un comunicado.
"A la luz de las claras conclusiones del panel, esperamos que Filipinas tome las medidas necesarias para solucionar esta situación sin más dilaciones", agregó.
La Organización Mundial del Comercio (OMC) publicó hoy el informe del Grupo Especial que había examinado las reclamaciones presentadas por la Unión Europea (UE) y Estados Unidos por el actual régimen filipino de derechos especiales aplicables a los aguardientes, en vigor desde 1997.
La medida en litigio es un impuesto especial sobre los aguardientes, en virtud de la cual Filipinas aplica un tipo uniforme reducido a los aguardientes de ciertas materias primas designadas, mientras que aplica tipos impositivos considerablemente superiores a los aguardientes de materiales no designados.
En Filipinas, todos los aguardientes nacionales (principalmente ginebras, coñacs, rones, vodkas, whiskys y variedades de tequila) se elaboran con una de las materias primas designadas, la caña de azúcar, mientras que la gran mayoría de los aguardientes importados se elabora con materiales no designados (por ejemplo cereales o uvas).
Por consiguiente, a todos los aguardientes nacionales se les aplica el tipo uniforme reducido, mientras que a la inmensa mayoría de los aguardientes importados se les aplica uno de los tipos impositivos superiores.
El Grupo Especial constató la medida de Filipinas, si bien de apariencia neutral, es sin embargo discriminatoria, y en consecuencia infringe las obligaciones establecidas en la primera y segunda frases del párrafo 2 del artículo III del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT en inglés) de 1994.
La UE había abordado este asunto sin éxito con Filipinas en repetidas ocasiones durante los últimos años y consultas con la OMC celebradas en Manila en octubre de 2009 no condujeron a una solución satisfactoria
Según la Comisión Europea, los impuestos aplicados a los aguardientes importados son entre 10 y 50 veces más altos que los que impone a las bebidas producidas en Filipinas.
Se calcula que, de 2004 a 2007, las importaciones de la UE de aguardientes a Filipinas han disminuido en más de la mitad (de unos 37 millones a 18 millones) debido a ese régimen de impuestos, sobre todo desde que se introdujo una nueva legislación en 2004.
El mercado filipino para productos destilados tiene un importante potencial, con un aumento en la demanda creciente en los últimos años, indicó la CE.
No obstante, el sistema de impuestos discriminatorio ha provocado que desde 2005 el consumo de aguardientes importados se redujera, en favor de bebidas locales, explicó.
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