Chávez defiende su gestión económica y las nacionalizaciones

Londres.- El presidente venezolano, Hugo Chávez, defendió su gestión económica desde que llegó al poder en 1999 y las nacionalizaciones de empresas extranjeras como una forma de ayudar a erradicar la pobreza en el país, en una entrevista que publica hoy el diario británico Financial Times.

"Venezuela ha tenido 22 meses consecutivos de crecimiento del PIB", afirma Chávez y precisa que en los seis últimos años el crecimiento ha sido del 7,8 por ciento y hubo un año en que llegó al 12 por ciento, "superado sólo por China".

El PIB venezolano cayó un 3,3 por ciento en 2009 y un 5,8 por ciento en el primer trimestre de este año, lo cual, según Financial Times, representa "el peor comportamiento de todas las economías latinoamericanas".

Chávez reconoce que "es cierto que la inflación sigue siendo elevada, pero -añade- en la década anterior la media fue del 80 por ciento y hubo un año, 1996, en que alcanzó un 100 por ciento".

El periódico señala que las nacionalizaciones acometidas por su gobierno en detrimento de empresas extranjeras han causado consternación en los países occidentales, pero para Chávez esas medias han ayudado a financiar programas sociales.

"Cuando llegamos (al poder), la pobreza afectaba a cerca del 60 por ciento de la población. Hoy es del 23 por ciento. La pobreza extrema era de un 25 por ciento y se ha reducido al 5 por ciento", asegura el presidente venezolano, según el cual el gasto público en programas sociales se ha quintuplicado desde 1999.

En cuanto al presupuesto, dijo que "hoy la media anual es de 30.000 millones de dólares en educación, vivienda y seguridad social".

Chávez negó que su larga permanencia en el poder se asocie en buena parte al alto precio del petróleo actual (desde los 11 dólares por barril en febrero de 1999) y explicó que Venezuela ha tenido que soportar en 2008 un recorte de la producción del 10 por ciento por mandato de la OPEP.

"Nuestra cuota es un 10 por ciento de la producción de la OPEP, de modo que tuvimos que reducir la producción en 400.000 barriles diarios. Pero no despedimos a un solo trabajador. Mantuvimos el empleo. El desempleo era de un 20 por ciento (antes de mi llegada al poder). Hoy ese de un 8 por ciento", agregó.