El déficit del Estado se ha situado en el mes de abril en 2.450 millones de euros, lo que supone un 0,22% del Producto Interior Bruto. El acumulado del año se sitúa, de este modo, en una cifra un 53,5% menor a la registrada en el mismo periodo del año pasado.
Según ha informado la vicepresidenta de Economía, Elena Salgado, en rueda de prensa estos datos "son compatibles" con el objetivo del Gobierno de acabar el año con un déficit del conjunto de las administraciones en el 6% del PIB.
Es más, la ministra dejó claro que no cree que "sean necesarias" nuevas medidas de austeridad para cumplir ese objetivo. Eso no significa que falten por cristalizar algunas reformas "ya en marcha" como las del sistema financiero y la negociación colectiva.
En definitiva, Salgado considera "una regresión muy importante" este descenso del déficit.
El problema viene con las administraciones autonómicas. La vicepresidenta, que ha sido muy cauta respecto a estas cifras (porque son datos de ejecución presupuestaria y no de contabilidad nacional) pero ha alertado sobre la evolución de algunas (sin dar nombres), ha anunciado que el déficit regional asciende hasta abril a 5.000 millones de euros, el 0,46% del PIB en el primer trimestre.
No hay que olvidar que las autonomías deberían cerrar el año con un déficit no superior al 1,3%. Por eso, Salgado destacó que estos números no son negativos del todo, pero insistió en su preocupación respecto a algunos casos y avisó de que el Ministerio analizará la evolución de las cuentas autonómicas.
De hecho, los gastos de la administración autonómica en su totalidad han crecido un 5,4%, aunque la vicepresidenta aclaró que los gastos de personal se están moderando.
Más concretamente, los datos muestran que ninguna autonomía supera el 1% de déficit. Las peor situadas en el primer cuatrimestre han sido Islas Baleares y Cataluña, con un déficit del 0,97% del PIB. En el lado contrario, se sitúan Aragón, Galicia y La Rioja, con superávit.
Respecto a las autonomías cuyo plan de ahorro fue rechazado en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera, la titular del Ministerio de Economía ha afirmado que se está analizando cada caso y que espera que se puedan solucionar pronto.
Auditorías del PP
En cuanto a las supuestas auditorías que el PP realizará en aquellas autonomías donde ha sustituido al PSOE en el Gobierno, la vicepresidenta ha subrayado que espera que los populares hagan esos estudios "allí donde gobierna" y no sólo en las que hayan sido gestionadas por los socialistas.
"Es un mensaje poco serio", ha aseverado, antes de recordar que hay un cuerpo de interventores "que realiza su trabajo de forma impecable" y al que podrían estar cuestionando con ese anuncio.
Relevo en el FMI
La vicepresidanta valoró igualmente la sucesión al frente del Fondo Monetario Internacional. Elena Salgado ha informado de que España apoyará al gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, como nuevo director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), ya que el voto de la silla que comparte con México en el Consejo Ejecutivo es "indivisible", aunque ha reconocido que le gustaría que el nuevo responsable del FMI fuera la actual ministra francesa de Economía, Christine Lagarde.
España comparte silla en el Consejo Ejecutivo del FMI con México, prácticamente en igualdad de peso en términos de votación, además de con Venezuela y con otros países de Centroamérica de menor peso en términos de Producto Interior Bruto (PIB).
Por este motivo, el voto de España es el voto de la silla y, según explicó Salgado, éste no se puede dividir. Además, actualmente le corresponde al representante de México ocupar el puesto de director ejecutivo de este grupo de países.
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