El director de Lex Nova cree que la reforma piensa más en la supervivencia de las empresas que en el empleo

Valladolid.- El director general de la editorial jurídica Lex Nova, Daniel Tejada, ha observado que la nueva Ley de Reforma Laboral, necesaria a su juicio para flexibilizar el mercado de trabajo, se "ha hecho pensando más en la supervivencia de la empresas que en que se genere empleo" a corto plazo.

Así lo ha manifestado Tejada en una entrevista con EFE, tras el análisis comparativo pormenorizado de normativa laboral que ha llevado a cabo un equipo de expertos de la editorial, la única del área jurídica con capital cien por cien español, cuyas conclusiones se difundirán a los más de 40.000 clientes de esta empresa, bien a través de la web, bien en soporte papel.

Para Tejada, la redacción difusa de determinados párrafos de la nueva norma, en especial el referido al despido por causas económicas, es "deliberada" ante el "impacto social" tan grande de la Ley, que ha conducido al legislador a dejarlo de "lado", y que derivará en una situación de "inseguridad jurídica" para jueces y empresas.

Hasta "dentro de un par de años no se verá" el resultado de la aplicación de la norma, una vez que se hayan presentado los expedientes laborales correspondientes; los jueces hayan resuelto en primera instancia; los afectados hayan planteado recursos y el Tribunal Supremo haya resuelto las causas y haya sentado así jurisprudencia con un criterio homogéneo.

Hasta entonces, a cada magistrado de lo Social, "que han puesto el grito en el cielo" con la nueva Ley, se le pedirá que sepa contabilidad, finanzas y otras materias, de forma que en cada lugar de España previsiblemente se decidirá de una forma diferente antes de que el Supremo establezca una serie de resoluciones homogéneas.

Tejada ha reconocido que la reforma laboral "era necesaria" y ha calificado de positiva la flexibilización del mercado de trabajo español, que hasta ahora era lo era muy poco, situación que había desembocado en la "pérdida de competitividad de forma gradual".

"Se ha ido por el buen camino" porque la reforma era "muy necesaria", otra cosa es la opinión de los sindicatos y las empresas sobre lo que se podría haber hecho, ha distinguido sobre un texto que a su juicio "se ha hecho pensando en la supervivencia de las empresas no en que se genere empleo" a corto plazo.

A pesar de valorar la norma por necesaria, el director general de Lex Nova ha reconocido que supone una "merma" para los derechos de los trabajadores con despidos más baratos.

"Las empresas y los países pueden quebrar", como ya le sucedió a España en la época de Felipe II, ha alertado Tejada, quien ha puesto como ejemplo la delicada situación por la que está atravesando actualmente Grecia e Irlanda y ha defendido que cuanto antes se pongan las soluciones antes se podrán atajar los problemas.

Sin embargo, desde el punto de vista del derecho comparado, al evaluar la legislación laboral de otros países y España, Tejada ha hecho hincapié en la importancia de situarse en las peculiaridades de cada país y en sus puntos de partida.

En España se está planteando llegar a la jubilación a los 67 años, mientras en casos como el de Francia se están sucediendo las movilizaciones por programar el abandono del trabajo a los 62, cinco años menos.

La parte positiva de la reforma consiste en la flexibilización del mercado laboral que beneficiará la competitividad y la negativa en la inseguridad jurídica que generará la redacción difusa del texto legal, ha resumido Tejada.

La empresa familiar Lex Nova fue fundada en 1953 por el abuelo de Daniel Tejada, constituye una de las primeras editoriales del ámbito jurídico de España, está especializada en Derecho Laboral, Fiscal y Civil, además de abordar también el Penal y el Administrativo, cuenta con unos 40.000 clientes y da trabajo a más de 150 empleados.

La posibilidad de búsqueda de información de manera "fácil", datos sobre el área de los convenios colectivos, la normativa vigente, y explicaciones sobre las novedades jurídicas forman parte de los servicios que dispensa la editorial, que contabiliza una facturación de quince millones de euros entre las tres empresas del grupo: Lex Nova, Grafolex y Novadix.