El líder sindical alemán asegura que merkel no debe decir a españa lo que hacer

El presidente del principal sindicato alemán (DGB) y de la Confederación Sindical Internacional (CSI), Michael Sommer, afirmó este jueves en Madrid que la canciller Angela Merkel no debería de decir a España lo que tiene que hacer en materia económica.
En una rueda de prensa conjunta con los líderes de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, Sommer dijo que espera que no sea la intención de la canciller venir a España para imponer medidas o para revisar las reformas adoptadas por el país.
Añadió que conoce “bien” a Merkel y que no cree que “sea esa su intención”.
Además, advirtió a “los alemanes en general” de que “deberíamos dejar de decir lo que tienen que hacer los demás”. “La historia nos dice que nos ha ido mal cuando le hemos dicho a los demás lo que tenían que hacer”, agregó el líder sindical alemán.
Por esta razón, dijo que “Alemania no puede dictar por si solo las políticas y los problemas que atañen a otros países o al conjunto de la UE”.
Sommer subrayó también que España es un país política y económicamente “muy importante en la UE” y que “en todo caso hay que respetarlo”. “El Gobierno alemán no puede presionar a otros gobiernos para que hagan reformas laborales”, aseveró.
AUTOFLAGELACIÓN ENFERMIZA
Por su parte, Toxo defendió también que no considera que Merkel venga a poner deberes a España. El líder de CCOO declaró que cree que “en este país tenemos una cierta tendencia a la autoflagelación que viene resultando un poco enfermiza”.
Por otro lado, los máximos reponsables de los sindicatos españoles mayoritarios aprovecharon la cumbre hispano-alemana para reclamar un “gran acuerdo político y social en Europa”. Según Toxo, este pacto debe defender una salida “solidaria” de la crisis.
Sobre este tema, el secretario general de UGT apuntó que este acuerdo debe “apostar por el empleo” y subrayó que las cumbres europeas “no pueden ser un sustituto de este pacto”, ya que estas reuniones “al final son sólo frases”.
No obstante, Méndez aseguró que este acuerdo europeo debería haberse producido hace tiempo, de manera que pudiera haber servido de base para los posteriores pactos nacionales, como el firmado ayer en España.
Subrayó que “lo lógico habría sido cerrar el acuerdo y de él derivarse acuerdos similares, parecidos al suscrito ayer, pero partiendo de esa referencia”.
El líder de UGT explicó que en España el Gobierno y los agentes sociales han tenido que llegar a ese acuerdo sin la referencia europea que “habría sido vital”.
DECLARACIÓN CONJUNTA
Los sindicatos españoles y alemanes presentaron este jueves una declaración conjunta por la cumbre hispano-alemana en la que muestran su “profunda preocupación” por la situación política, económica y social que atraviesa Europa.
En este texto, las organizaciones sindicales subrayan que “nunca como hoy” habían sido tan “decisivas” la cooperación, la decisión y la voluntad política de los gobernantes.
De esta forma, el documento sostiene que “la recuperación económica de los países de la Unión no tendrá éxito si se basa en la adopción de políticas económicas conservadoras de ajuste presupuestario y de reformas estructurales de signo neoliberal”.
Al contrario, las organizaciones sindicales aseguran que las medidas deben fundamentarse en la “promoción del crecimiento sostenible de la economía y del empleo, y el mantenimiento de la cohesión social”.
En la rueda de prensa, Toxo calificó de positiva la cumbre entre los gobiernos español y alemán, aunque criticó que en un principio, “como reflejo de la huelga”, cuando se organizó el encuentro no se contó con los sindicatos españoles. No obstante, gracias a la petición del DGB alemán a la canciller Merkel, finalmente las organizaciones sindicales sí que estarán presentes.
También dijo el líder de CCOO que la cumbre europea de este viernes debería servir para recuperar la agenda del G-20 de Londres, en la que se defendía el establecimiento de elementos de control sobre el sistema financiero internacional.
Así, defendió que estas medidas deben priorizar la prohibición de movimientos especulatorios a la baja, “que son los que afectan a la deuda soberana”.
Sobre este tema, Méndez añadió que a veces prevalece más en las políticas europeas “la conservación de los intereses de las entidades financieras que el interés común de apostar por una salida centrada en el empleo, que anticipe la recuperación y que sería la mejor fórmula para estabilizar el euro”.
Por otro lado, Toxo criticó que las políticas que descansan exclusivamente en el ajuste “pueden condicionar la salida de la crisis” y rechazó que “Europa, en un marco de economía globalizada, no pueda competir sosteniendo libertades y sistemas de protección social”.