El MEDE adopta el instrumento europeo para recapitalizar directamente bancos

  • La junta de gobernadores del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) adoptó hoy el instrumento de recapitalización directa para bancos de la eurozona como medida de último recurso, informó hoy su director gerente, Klaus Regling.

Bruselas, 8 dic.- La junta de gobernadores del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) adoptó hoy el instrumento de recapitalización directa para bancos de la eurozona como medida de último recurso, informó hoy su director gerente, Klaus Regling.

Esta decisión supone una ratificación formal de un instrumento que ya se encuentra en funcionamiento y que permitirá a partir de 2015 inyectar fondos del MEDE en las entidades que sean sistémicas y viables cuando se cumplan una serie de requisitos.

"El MEDE está listo para utilizar el instrumento de recapitalización directa en caso de necesidad", explicó Regling, quien sin embargo consideró que es "poco probable" su uso a la vista de los resultados de la revisión de calidad de activos y las pruebas de resistencia a la banca europeas.

"Sin embargo, el hecho de que el MEDE puede proporcionar un rescate de última instancia para los bancos sistémicos y viables es tranquilizador para los mercados y una salvaguarda de la estabilidad financiera en la zona euro", añadió.

La recapitalización directa no tendrá carácter preventivo y solo se podrá utilizar después de que se hayan aplicado quitas a un 8 % de los pasivos y hayan contribuido al saneamiento los fondos nacionales de liquidación -en el caso de España el FROB- o, a partir de 2016, el fondo único de resolución establecido para ese año.

Primero se aplicarán las quitas sobre los pasivos, después los recursos públicos nacionales y, en caso de que los gobiernos no puedan ayudar, tendrán que solicitar al MEDE un programa de rescate a la banca, como hizo España.

Solo en última instancia entraría en juego la recapitalización directa, de modo que se reducen las posibilidades de que se vacíe demasiado rápidamente los fondos disponible en el MEDE para la recapitalización directa, 60.000 millones de euros.

Otra condición es el reparto de la carga, es decir, la exigencia de que aquellos países de la eurozona o acreedores tendrán que recapitalizar a la entidad con problemas hasta que alcance un ratio de capital al mínimo de solvencia (un 4,5 %), si no lo tiene.

Si alcanza este nivel, entonces el MEDE aportaría el 80 % de la inyección y el gobierno en cuestión el 20 % restante durante los dos primeros años de vida de la recapitalización directa, porcentaje que se reducirá después al 10 % cuando el supervisor bancario único -rol que desempeña el Banco Central Europeo- llevará vigilando más tiempo la banca de la eurozona.

Mostrar comentarios